Imputados por estafar 10.000 euros con tarjetas sanitarias de fallecidos

La Guardia Civil puso ayer a disposición judicial a dos responsables de la residencia de mayores Virgen del Rosario acusados de estafar 10.049 euros a la administración mediante el uso de recetas médicas de personas fallecidas. El presunto fraude se realizó con las tarjetas sanitarias de 26 personas fallecidas entre enero de 2010 y junio de 2012 cuyas tarjetas sanitarias siguieron siendo utilizadas tras su muerte para la obtención de fármacos y productos sanitarios de forma gratuita.

La trama destapada en la operación ‘Pegollo’ fue detectada por la Inspección Farmacéutica de la Delegación de Salud y Bienestar Social a través del programa de control de dispensación de medicamentos a personas fallecidas en residencias de personas mayores, incluido en el Plan Anual de Inspección de Servicios Sanitarios de 2012. Fue la propia Inspección la que avisó a la Guardia Civil del posible delito penal y la colaboración de ambos consiguió dar con los dos imputados que se encuentran a disposición del juzgado número 3 de Roquetas de Mar.

La Inspección de Farmacia detectó igualmente que el centro carecía de autorización de funcionamiento para las unidades asistenciales de medicina general así como de enfermería a pesar de estar prestando estos servicios. Por ello,  la Inspección Provincial de Servicios Sanitarios ha propuesto la apertura de un expediente sancionador al centro que podría suponer una multa de entre 3.000 y 15.000 euros.

La directora del centro, Paula Morales, rechazó ayer realizar ningún comentario o aclaración sobre los dos imputados y sobre la apertura del expediente.

Recetas para 20 días
Los imputados, responsables de la residencia de personas mayores, adquirían en farmacias, con cargo al sistema público de salud, las medicinas para administrarlas a sus residentes. Estos fármacos, habían sido previamente recetarlos por los respectivos médicos de los pacientes, correspondientes al tratamiento que debían seguir los enfermos y que debían renovar cada 20 días.

Aprovechando el fallecimiento de alguno de los ancianos residentes, los imputados continuaban retirando los fármacos durante el periodo de validez del tratamiento.

Salud ya destapó una trama similar el pasado enero en una residencia de Vícar

La operación Pegollo es la segunda actuación de la Guardia Civil en colaboración con inspectores de Salud y Bienestar Social de la Junta. Ya en la Operación “Profano”, desarrollada a primeros de año, se procedió a la imputación de los dos responsables de una residencia de ancianos de Vícar quienes hacían “idéntico uso fraudulento de la recetas electrónicas de personas fallecidas” con las que estafaron 4.367 euros. Los agentes admiten la “casualidad” de los hechos pero confirman que “no existe conexión” entre ambas.