La asamblea de CASI respalda con votos la compra de Agrupalmería

Los socios de la Cooperativa Agrícola San Isidro (CASI) daban ayer un respaldo mayoritario a la dirección de la sociedad para cerrar definitivamente la compra de las instalaciones de Agrupalmería, que se integran a partir de ahora en los activos del grupo de La Cañada.
El presidente de CASI, José María Andújar, fue el encargado de presentar a los socios una operación descrita como “una oportunidad histórica que jamás hubiéramos pensado que nos iba a llegar”. Y la respuesta del socio ha sido dar una mayoría holgada al plan: 462 votos a favor, 201 en contra y 32 abstenciones.

Compra cerrada Queda claro en cualquier caso que CASI no adquiere en esta operación la marca Agrupalmería, sino las instalaciones que esta posee al norte del aeropuerto de Almería. Unas instalaciones que pasarán a formar parte de la coperativa adquiriente.
Como era de esperar en la asamblea de ayer se produjo un intenso debate centrado, sobre todo, en las dudas que genera una operación de tanto calado como la decidida por la empresa. Esas dudas se centraban en la idoneidad del proyecto y en la financiación de los 14,5 millones en que se ha cifrado el total de la compra.
A este respecto, la CASI ha contado con el apoyo de Cajamar en la operación. La rural almeriense aporta los recursos financieros necesarios en unas condiciones que Andújar no duda en considerar “muy buenas”, al cerrarse en unos intereses del euríbor más cero puntos.

Siete meses La aprobación de ayer pone punto y final a un proceso que ha supuesto siete meses de intensas negociaciones. Ante de llegar ante los socios ha sido objeto de un estudio exhaustivo por parte de la Junta Rectora y del bufete de Alfonso Casado Mendoza, que indica en sus conclusiones que la operación “ofrece las máximas garantías desde el ámbito de la seguridad jurídica”.

Las nuevas instalaciones con las que contará la cooperativa de La Cañada disponen de 16.945 metros cuadrados de planta baja, otros 18.654 metros cuadrados en semisótano, 1.600 de oficinas, 267 metros en sala de ventas y 566 de altillo, además de unos terrenos anexos de 7.000 metros cuadrados.

El objetivo declarado de CASI es utilizar estas instalaciones ya para la próxima campaña, y centrar buena parte de la actividad en el tomate verde, el 80 por ciento del tomate que los agricultores comercializaban a través de Agrupalmería.

La compra de las instalaciones permitirá a CASI reforzar su liderazgo en el mercado del tomate, de la que es la primera comercializadora a nivel europeo. A los casi 2.000 socios y colaboradores de la empresa se sumarán los alrededor de 300 que venían trabajando con Agrupalmería, con lo que las expectativas de facturación se incrementarán en torno a un 15 o un 20 por ciento este año hasta acercarse a los 230 millones de euros y por encima de los 250 millones de kilos de tomate.