El copago enfrenta a los partidos

El PSOE ha puesto en marcha una campaña para rechazar de manera frontal el copago hospitalario impuesto por el Gobierno del PP, que entrará en vigor el próximo 1 de octubre, y ha criticado que “el Gobierno se cebe con los enfermos, castigando y empobreciendo a los más vulnerables”; por lo que ha pedido la dimisión de la ministra de Sanidad, Ana Mato.

Ese planteamiento hecho público la semana pasada desde Madrid se trasladó ayer a los almerienses a través del secretario provincial, José Luis Sánchez Teruel, y la diputada Gracia Fernández, miembro de la Comisión de Sanidad del Congreso.

En el caso de Almería, la incidencia se ha estimado en unos 3.000 enfermos. Los fármacos que éstos recibieron en los hospitales públicos almerienses supusieron un gasto superior a los tres millones de euros.

En el supuesto de que los pacientes que van a un centro sanitario a por su tratamiento farmacológico tuvieran que abonar un 10 % de los mismos, la cantidad superaría los 300.000 euros, calcula el PSOE.

“Aunque el Gobierno diga que el copago tendrá un coste limitado, son muchos y por mucho tiempo los medicamentos que tienen que tomar las personas afectadas” por determinados tipos de cáncer o hepatitis a cuyos tratamientos afectará la medida, “por lo que la carga económica se multiplica de tal forma que habrá personas que no podrán hacerle frente”, se señala desde el principal partido de la oposición, que el pasado fin de semana difundió un vídeo para denunciar esta “medida cruel” del Gobierno. El calificativo lo emplearon ayer tanto Teruel como Fernández.

El compañero de Gracia Fernández en la Comisión y portavoz, José Martínez Olmos, ha explicado que aplicar el copago a los medicamentos dispensados de manera ambulatoria en los hospitales, puede convertirse en una nueva barrera de acceso a medicamentos que son necesarios para algunos pacientes”.

Los socialistas se refieren también al “ocultismo” que ha vuelto a practicar en esta ocasión el Gobierno al aplicar este nuevo” hachazo”, ya que “la ministra Ana Mato compareció la semana pasada en la Comisión de Sanidad del Congreso y no fue capaz de anunciarnos la medida”.

Por su parte, la delegada del Gobierno en Andalucía, Carmen Crespo, ayer en Almería ha instado a la Junta de Andalucía a que asuma que tiene que “pagar sus facturas” y hacer “sostenible” el sistema público de salud en la comunidad autónoma al tiempo que ha apelado a la “concienciación” sobre la situación del SAS, informa Europa Press.

En esta línea, ha subrayado que la deuda del Ejecutivo que preside Susana Díaz en esta materia copó “más del 90 por ciento” de la cuantía del Plan de Pago a Proveedores.

Crespo ha dado respuesta así a las reacciones en el seno del Gobierno andaluz al copago farmacéutico de algunos fármacos de dispensación hospitalaria cuya entrada en vigor está prevista para el 1 de octubre y que ha llevado al vicepresidente, Diego Valderas, a anunciar que se va a estudiar el contenido del decreto para determinar si cabe la interposición de un recurso de inconstitucionalidad.

“La Junta tiene que darse cuenta de que tienen que hacer sostenible el sistema público de salud y de que tienen que pagar sus facturas porque realmente lo han hecho gracias al Gobierno de Mariano Rajoy”, recordó.