La patrulla en bicicleta se mantiene para todo el año

La patrulla en bicicleta de la Policía Local se mantendrá durante todo el año, después de que la experiencia de los últimos meses ha sido “muy satisfactoria”, tal como señala el inspector 2º jefe del cuerpo, Antonio Torres. La vigilandia a dos ruedas se puso en marcha poco antes de Semana Santa y se reforzó de cara al verano, pero aunque la temporada turística ya haya acabado, “continuarán las patrullas principalmente en los Paseos Martítimos y en el núcleo urbano”, confirma.

Durante el otoño y el invierno volverán a ser dos parejas de policías las que se encarguen de la seguidad en las zonas peatonales, si bien durante el verano se había reforzado la patrulla con dos grupos más. Además, continuarán teniendo como apoyo un vehículo de la Policía Local, también patrullando, de forma que pueda reforzar el dispositivo si es necesario. 

Torres comenta que la percepción de los ciudadanos y comerciantes ha sido en los meses de verano muy positiva hacia esta iniciativa de seguridad que hace a la policía “más cercana al ciudadano”. Por ello, adelanta que de cara al inicio de la próxima temporada turística es posible que se fomente la vigilancia de llos agentes en bicicleta con algunos cambios. 

Prevención

Su labor es “principalmente preventiva” y su presencia constante consigue reducir el comercio ilegal y los pequeños hurtos en la calle. “En unos días comenzarán a llegar los turistas del Imserso por lo que las patrullas en el Paseo Marítimo seguirán siendo muy necesarias”, considera Torres. La cercanía de los agentes hace que los vecinos y turistas se sientan más seguros.

Botellón

Una de las acciones en las que ha sido fundamental la presencia de patrullas en bicicleta y a pie en los Paseos Marítimos ha sido la prevención de los botellones masivos en las playas del municipio, principalmente en Aguadulce, donde más gente se concentraba tradicionalmente las noches de verano.

De hecho, el inspector 2º jefe de la Policía Local, Antonio Torres, afirma que las quejas y denuncias de vecinos por molestias derivadas del botellón se han reducido hasta en un 80% con respecto a las llamadas que recibía la Policía en alos anteriores.