Menos del 2% del total de las ayudas de la Junta de Andalucía para fomentar la contratación de jóvenes desempleados serán para parados almerienses. El ‘Bono joven’, que bonifica con 400 euros al mes durante un año como máximo a las empresas que contraten a jóvenes en paro, ha dejado a la provincia con una tasa de beneficiarios mínima. De los 3.125 bonistas, sólo 54 son almerienses.
Se da la circunstancia de que la provincia de Almería ha sido una de las que más solicitantes presentó para recibir la bonificación que, en su primera convocatoria, acaba de ser resuelta.El baremo utilizado para otorgar las ayudas regulado en el Decreto Ley 8/2013 ha sido el causante de “desvirtuar” una propuesta que nació con el objetivo de fomentar el empleo entre los jóvenes desempleados, universitarios o con Formación Profesional, y que, finalmente, ha primado más el territorio desfavorecido que la tasa de empleo joven o incluso el expediente académico del solicitante.
En la valoración de cada una de las solicitudes, sólo el 60% tiene que ver con la titulación y el expediente académico del joven parado. El otro 40% está relacionado con “estadística pura”. En este marco, uno de los criterios tiene que ver con la zona en la que se reside.
La puntuación del territorio (se ha dividido Andalucía en tres niveles) se ha hecho en función del número total de desempleados, el número de trabajadores afiliados a la Seguridad Social y la población en edad de trabajar de cada zona. Además, no se puntúa sólo el territorio sino también el municipio en concreto.
De ahí que quienes viven en un lugar concreto pueden tener más puntos que otro residente en otro punto del territorio, pero con más posibilidades de ser contratado y mejor expediente académico.
Se da la circunstancia, además, de que la tasa de paro contemplada en el baremo es global, es decir, que no tiene en cuenta el desempleo juvenil, sino el total. De ahí que las provincias de Málaga y también de Cádiz (con un elevado paro entre mayores de 45 ) hayan sido las que más bonistas tienen con solicitudes similares a las de Almería.
El baremo, puesto en duda nada más hacerse público por los propios solicitantes e incluso por algunos de los impulsores del bono joven, llegaba a puntuar incluso el “itinerario de inserción laboral” abierto en alguna de las oficinas de Andalucía Orienta. Oficinas que, por otra parte, llevan cerradas meses lo que imposibilita puntos por eso.
Esta fórmula de fomento del empleo para jóvenes está condenada a ser modificada. De hecho, ya son varias las voces que han apelado a la revisión del baremo y han llegado hasta el director general de Políticas Activas de Empleo, el almeriense José Antonio Amate.
Y es que, el bono del empleo llegará a un millar de desempleados en Cádiz, el total de los solicitantes. Similar porcentaje de bonos se repartirán en Málaga, con 1.300 solicitantes. En otras provincias, la relación solicitante-bono está muy alejada del 100% como ocurre en Almería, Huelva o Jaén.
Desde la Consejería de Empleo aclaran que no es tan importante la procedencia del bonista como las empresas que pueden contratar a los jóvenes. Las empresas pueden contratar a quienes lo deseen independientemente de su lugar de origen.
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