El fratricidio de Gérgal abre un debate sobre los recursos de la Guardia Civil en la provincia, su número de efectivos y la disponibilidad de los cuarteles. El puesto gergaleño estaba sólo a dos minutos del lugar del crimen, sin embargo, los domingos cierra y las primeras patrullas llegaron desde Fiñana.
Esta situación ha provocado cierto malestar en el pueblo y, de forma particular, las duras críticas del PSOE de Almería ante la gestión de los recursos de la Benemérita realizada por el Gobierno popular. Los socialistas se quejan de que servicios básicos como la seguridad cierren a tiempo parcial, tardes y fines de semana.
Andrés García Lorca, subdelegado del Gobierno en Almería, replica a los socialistas y asegura que la medida se basa en criterios de “eficiencia” y que se puso en marcha “con el gobierno socialista en 2010”. “Me sorprende que hagan política con la seguridad”, asevera el subdelegado del Gobierno.
También responde el coronel jefe de la Guardia Civil en la provincia. Francisco Jiménez asegura que “la Comandancia realizó un estudio de ocho meses para ver el uso de los cuarteles y en todos los fines de semana, en Gérgal por ejemplo, fueron 20 personas y la mayoría para cuestiones administrativas”.
Según el coronel, si el cuartel de la Guardia Civil de Gérgal hubiera estado abierto el domingo del crimen la respuesta “no hubiera sido más rápida” porque, según su versión, es más ágil llamar al centro de coordinación del 062 (Comandancia), que tiene una perspectiva completa del servicio, es decir, de los recursos disponibles. Asimismo, Francisco Jiménez añade que hay una decena de puestos principales repartidos por toda la provincia que están constantemente abiertos a los ciudadanos.
El PSOE ha presentado varias iniciativas en el Senado para pedir explicaciones por el cierre parcial de cuarteles. Juan Carlos Pérez Navas asegura que contribuye a crear “sensación de inseguridad en la provincia”:
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