Los colegios profesionales, como corporaciones de derecho público, son unos auténticos activos de la sociedad, cuyo papel se ha visto acrecentado durante los dos años de pandemia. Velar por la deontología profesional, anticiparse al futuro y preparar a los colegiados para proporcionar soluciones a los nuevos retos, acompañar a los jóvenes titulados en la Universidad de Almería a dar sus primeros pasos, guiar en la transformación digital, y en definitiva, contribuir de manera decidida al desarrollo sostenible de Almería son los principales valores de los colegios profesionales.
En esta línea, Miriam Benavides, autora de la serie ‘Valor social de las profesiones colegiadas’ que se publica en la revista ‘Profesiones’, afirma que “dedicadas a la mejora de nuestra calidad de vida mediante la búsqueda del bienestar común, las profesiones liberales se afianzan como uno de los principales activos de toda sociedad, gracias al saber de sus colegiados. Un conocimiento, fruto de un desarrollo profesional continuo que, amparado por un código deontológico, busca dar respuesta a aquellas necesidades que van surgiendo y que cada vez precisan de una mayor actuación de las profesiones. En un contexto como el actual, marcado por un gran sentimiento de incertidumbre, la ciudadanía ve en las y los profesionales colegiados la figura a la que acudir en momentos donde la responsabilidad y el profesionalismo marcan la diferencia de todo servicio”. Es el fin último de este Anuario y por lo que trabajan los diferentes colegios profesionales.
Almería cuenta con unos colegios profesionales proactivos y muy participativos en la sociedad que defienden los intereses de sus miembros colegiados y trabajan conjuntamente con las administraciones para el progreso sostenible de la provincia. Una labor que se ha intensificado especialmente con la Universidad de Almería, con la que mantiene vasos comunicantes.
Actualmente la digitalización es uno de los principales objetivos de todos ellos, y por eso están acompañando a los colegiados para que realicen de manera armónica y sin traumas esta transformación. También la sostenibilidad, aplicando todos medidas para contribuir a un futuro más próspero y responsable desde el punto de vista medioambiental, social y laboral.
Por eso, como concluye Miriam Benavides, “crear sinergias entre profesiones se posiciona como la principal vía por la que adoptar soluciones multidisciplinares a los retos planteados por la pandemia, precisando, a su vez, de una interlocución real entre dichas corporaciones y los poderes públicos”. Y es que los colegios profesionales son, en definitiva, un activo para la provincia de Almería.
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