Cuando un jugador se hace con la titularidad se esfuerza el doble para mantenerla. Es lo que he está pasando a Lucas Robertone, que dio el susto en el entrenamiento del jueves al torcerse el tobillo izquierdo en una acción fortuita y en solitario al intentar controlar un balón. Saltaron las alarmas en el equipo porque Rubi podía perder a una de sus piezas clave en la alineación. De hecho, el técnico habló con el doctor Maziel para conocer de primera mano el alcance de la lesión. Finalmente no ha habido problemas y el argentino saltó al campo con un fuerte vendaje en la zona afectada y se ejercitó con normalidad, por lo cual seguirá en el once ante el Amorebieta. Ha dado un paso al frente este curso y formará la medular con Curro Sánchez y Samú Costa.
Cerrado
El Almería entrenó en el Mediterráneo a puerta cerrada. Rubi dio una charla a sus hombres antes de comenzar a trabajar y preparar tácticamente la visita al colista de la competición, aunque esto preocupa más que alivia al equipo rojiblanco. Descartado Juan Villar y entre algodones Francisco Portillo, que después del partido con el Real Oviedo apenas se ha dejado ver por el Anexo. Este viernes se quedó con los recuperadores. Hoy, última sesión, también en el Estadio, y por la tarde viaje a tierras vascas. La expedición volverá a Almería después del encuentro.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/338/ud-almeria/220925/no-hay-quien-pare-a-robertone