Todo el Almería en el mercado

La UD Almería navega en Primera División con viento de cola en un mar tranquilo, al menos de momento, porque pese a la cercanía de la zona de descenso -a tan solo un punto-, la recuperación deportiva y anímica de los jugadores frente al Atlético de Madrid vuelve a generar confianza no solo en el vestuario, sino también entre los aficionados. Y es que el nuevo año y el mercado han puesto en el escaparate a toda la plantilla para lo bueno y lo malo. Rubi confirmó que había “recuperado” para la causa a varios deportistas el pasado domingo. Buen paso.

Desaparecido
Claramente Samú Costa, que no jugaba en Liga de titular desde la visita al FC Barcelona, es el espejo. De un jugador así se puede esperar un rendimiento incluso mayor que el ofrecido contra el Atlético, siendo el que más pases dio tratando de iniciar el fútbol desde atrás. Sin embargo, y ahora que el mercado de invierno permanece abierto, nadie está tranquilo. Agentes que quieren mover ficha; futbolistas que no lo ven claro y se quieren ir (Pacheco); y operaciones de última hora hacen que Rubi duerma con un ojo abierto. Y lo ‘peor’ es que tiene claros motivos.

El Almería ha disparado en el mercado a varios de sus activos. Sergio Akieme refleja la regularidad y la potencia de un lateral izquierdo al que muy mal le tienen que ir las cosas para no dar otro salto deportivo. Puede que no todos los fines de semana llegue al sobresaliente, pero nunca baja del notable. No es de extrañar que clubes de nivel en España se hayan fijado en él.

Pero Lucas Robertone es quien más ha crecido económica y futbolísticamente. La renovación por parte del club hasta 2028 fue una jugada maestra para asegurarse un traspaso de calado en verano, y es que su caso se parece al de Akieme. Los 6 millones de valor de Transfermarkt se quedan cortos para el argentino, así como los 7,5M del defensa.

Ventas
Cuando El Assy sacó pecho en sala de prensa anunciando que “no vamos a descender” y que había “ofertas” por varios integrantes del equipo, entre líneas se lee que la política del Almería no cambia independientemente de la categoría. Cada año hay que hacer una o dos operaciones de grandes sumas de dinero y tanto Akieme como Robertone ya la han asegurado. 

Pero hay más. La edad y el margen de mejora provocan que Samú Costa pueda ser el tapado en cualquier mercado; que unos experimentados Adri Embarba y Leo Baptistao hayan recuperado la felicidad y la alegría en su fútbol con el Almería; un Largie Ramazani que, inspirado, marca diferencias; y un El Bilal Touré que cada vez está más hecho. Grandes activos con los que asegurar una temporada tranquila dentro de los sobresaltos habituales que tiene una carrera por la permanencia; y también traspasos acordes con la calidad y rendimiento de los profesionales en el mercado de verano o invierno.

¿Y Sousa?
La afición le tiene un cariño especial porque es un trabajador en la sombra y que brilló en Segunda sabiendo que Sadiq era el titular. Contra el Atlético pasó a ser el tercer delantero quedándose fuera de la convocatoria. El Bilal Touré y Luis Suárez jugaron. Milovanovic pasó al filial. 

Con contrato hasta 2024, el delantero ya comentó a LA VOZ y SER que no se marchará cedido. La plantilla es larga y el mercado no acaba hasta el 31. Aquí puede pasar cualquier cosa.