¡Guantazo a Francisco!

Ni en sus peores pesadillas se podía imaginar el entrenador almeriense, Francisco, un debut ante su afición después de dos victorias a domicilio como el que se dio en Vallecas ante el Atlético de Madrid. Desde el primero de los minutos cuando encajaba el Rayo el primer gol hasta el séptimo en la recta final el encuentro fue una pesadilla para el preparador que nada pudo hacer para evitar un guantazo en toda regla que bate sus registros negativos en los banquillos. Desde aquel 0 a 5 en un Almería-Real Madrid, no se le recuerdan marcadores tan negativos. Ha sido un bajo de realidad a tiempo para él y sus jugadores que llegaban con dos triunfos visitantes, con los abonos agotados y dispuestos a hacer historia.

El guantazo al Rayo de Francisco no tiene nombre para un equipo que en la tercera jornada de Liga jugaba para ser líder igualando al Real Madrid con una victoria pero el Cholo Simeone con su Atlético no dejaron opciones al Rayo y lo dejaron sumido en un desconcierto sin precedentes porque estos resultados ya no se suelen dar en la Primera División.

Francisco soñaba con el debut en Vallecas ganando al equipo más en forma de la Liga pero la cruda realidad marcó las distancias entre las plantilla y el carrusel de goles dejaron tocada la moral de un entrenador que se levantará pero para su palmarés quedará esta paliza.

Sin opciones

El Rayo no tuvo opciones en el partido y desde el primer minuto se vio sometido por la contundencia del Atlético que era un ciclón y no perdonaba a un equipo desconcertado y sin argumentos para parar la sangría de goles. La paliza no tiene precedentes en la barriada de Vallecas.

Cuando los seguidores del equipo de la franja esperaban una victoria para seguir la estela del Real Madrid ha llegado un baño de realidad para saber las distancias de nuestra Liga en lo deportivo y en lo económico.

El debut soñado

El entrenador almeriense hablaba en la previa del partido de ofrecer un gran partidos a sus aficionados después de dos partidos lejos de Vallecas y con sendas victorias. Confesaba su afinidad con el equipo vallecano y sentirse feliz pero el fútbol no perdona.

El guantazo que le ha propinado el Atlético al Rayo no tiene precedentes y toca levantarse al entrenador almeriense para seguir creciendo como técnico y levantar a su plantilla después de una derrota que da la vuelta al mundo.