Si los detalles económicos de la marcha de Lázaro Vinicius a Palmeiras han salido a la luz, también hay más información sobre Kaiky Fernandes, que se marchó cedido al Albacete Balompié hasta final de temporada para encontrar los minutos que no disfrutaba en la UD Almería. El central de 21 años debutó el sábado en el Carlos Belmonte en el empate de su equipo contra el Cartagena (1-1), y este jueves tuvo lugar su puesta de largo. No estuvo la persona que lo fichó, Alfonso Serrano, que dio por finalizada su etapa en el club después de terminar el mercado de invierno.
Kaiky explica que gracias a Serrano y a una llamada a Sousa, exjugador rojiblanco, se decantó por el Albacete por encima de otras propuestas de la categoría: "Mi fichaje por el Albacete fue muy rápido. Los últimos días de mercado son una locura y había varios clubes que me querían. La clave fue que el director deportivo del Albacete fue a Almería para hablar conmigo y luego Dyego Sousa, que está en el Alcorcón, me habló maravillas del juego de este equipo. Alfonso Serrano fue providencial porque cuando alguien te quiere te pone como prioridad y me encantó la forma de dirigirse a mí".
Velocidad
La negociación fue muy rápida, en apenas 72 horas, y para Kaiky era fundamental salir para rodarse en Segunda y no ha notado el cambio del estilo de Garitano al de Albés, ya que los dos son valientes en su planteamiento: "Fue unos tres días antes de cerrar el mercado de invierno cuando me entero del interés del Albacete. Hablaron los clubes y mi representante, mientras que yo esperé para tomar la decisión final. El estilo de juego del Albacete no es muy diferente al del Almería porque jugamos con las líneas adelantadas, entonces mi adaptación ha sido rápida".
Oportunidad
Quiere dejar claro que fue él quien tomó la decisión de irse al Albacete. Reconoce que hubo contactos con el Real Zaragoza pero no fructificaron. De hecho, es el Almería quien le comunica que existen varios pretendientes en Segunda: "El Almería tenía varias posibilidades pero al final decidí yo y elegí al Albacete después de hablar con Alfonso Serrano. Debuté el sábado y gracias a los compañeros y al entrenador me sentí cómodo. Tenía ganas de jugar en el Carlos Belmonte". Lo ve como una oportunidad y no como un frenazo a su carrera deportiva: "No es un paso atrás. Hablo con mi familia y en el fútbol es necesario moverse alguna vez para tomar impulso. Soy feliz en el Albacete y considero que he acertado en mi decisión. Lo más importante es que estamos juntos en esto para conseguir la permanencia y vamos por el camino correcto".
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