El segundo fichaje de la pasada temporada fue anunciado como central y juega bien en la medular. Un comodín para Rubi ya que tiene contrato hasta el año 2028 y por ahora no está sonando en el mercado. El Almería pagó traspaso al Real Betis y ha firmado una temporada discreta, como el resto de compañeros. Vino para ser un jugador diferencial y desde su presentación nacía la duda de si era mejor central que centrocampista y a día de hoy nadie sabe a ciencia cierta cuál es la posición que se adapta a su forma de entender el fútbol. A Rubi seguro que le encaja en su plantilla porque apuesta por hombres que hagan diferentes funciones. Para central ya tiene lista de espera pero en la medular ofrece mucho más el jugador que vino del Real Betis. Nadie ha preguntado al Almería por Édgar hasta la fecha y el jugador hará la pretemporada con el técnico catalán.
Se esperaba mucho de Édgar en el Almería y los aficionados lo tenían como un futbolista capaz de ser el líder de la medular pero no se dieron las circunstancias y la temporada nació torcida con el primer penalti en contra cometido ante el Rayo Vallecano. Hizo lo que pudo para evitar la caída del equipo y firmó buenos partidos pero no alcanzó esa regularidad que le puso en el foco del Almería.
Pasado
El Almería se fijó en Édgar cuando jugaba cedido en el Real Oviedo en la última etapa de Alfonso García como presidente. Luego volvía a Sevilla y logró hacerse un hueco en el equipo firmando grandes partidos en el Benito Villamarín. La llamada del Almería no le hizo dudar y previo pago de la cantidad establecida por los clubes se comprometía hasta 2028 con su actual club. Su ficha no es de las más elevadas de la plantilla, pero tampoco es barato. El Almería sabía de todo lo que le ofreció al Real Betis y no dudó en apostar por sus servicios pero el Édgar del Villamarín nunca se ha visto por el Mediterráneo y la historia está por escribirse en el club de Turki Al-Sheikh.
Presente
Ahora que los profesionales están de vacaciones viendo fútbol por la Eurocopa, a Édgar le toca estar al tanto de lo que se mueve en el mercado porque como la mayoría de sus compañeros, se considera un futbolista de Primera División a todos los efectos. Édgar tiene claro cumplir todo lo firmado con el Almería pero como sucede en cada ventana de mercado, los jugadores están en venta y si llega una buena oferta saldrá. Da el perfil de lo que necesita Rubi en la medular y le vale para el centro de la defensa pero el verano promete ser muy largo para aquellos que aún no saben si quieren competir en la segunda categoría.
Futuro
Édgar está plenamente adaptado al Almería. El segundo fichaje vino convencido de echar raíces en la ciudad y en un club que tiene mucho que decir. Nadie podía imaginar un descenso tan doloroso, los profesionales han perdido valor de mercado y muchos van a cobrar menos. No es una situación cómoda la que le espera a los profesionales. Rubi va a tener mucho que decir a la hora de elegir jugadores y todo apunta a que Édgar se va a quedar porque es de esos futbolistas que gustan al preparador catalán. Como tantos compañeros, su futuro es incierto y hasta el último día de plazo habrá que permanecer atentos.
Rubi puede contar con Édgar como un comodín.
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