Garrucha se convierte en el gran santuario de la enología española

Un año más, y ya suman 21, el restaurante Escánez de Garrucha ha acogido esta semana un evento considerado como el máximo exponente de los grandes vinos españoles. Allí se reunieron varios de los mejores enólogos y bodegueros del país y, junto a ellos, un grupo de 50 catadores dispuestos a discernir qué vino debe ser considerado como el mejor salido en estos últimos años de las bodegas más reputadas.

Es la XV edición de la Cata de los 5+1 mejores vinos tintos de España (las seis que faltan fueron en años difíciles por la crisis económica iniciada en 2008 y los tres de la pandemia del Covid) y a ella concurrían los seis caldos mejor valorados en las guías de vinos que se editan en España: La Nieta 2020, Viña El Pisón 2020, Aro 2019, Amancio 2019, Alabaster 2020 y Cirsion 2019.

El mejor de España
Los catadores se enfrentaron con seis copas numeradas, sin posible identificación previa (de ahí la calificación de ‘cata ciega’) y tras el recuento de las puntuaciones resultaba ganador de esta cata, y por tanto el calificado como el mejor de los seis finalistas, el Alabaster 2020 firmado por el que para muchos es en la actualidad el mejor enólogo español, Marcos Eguren, que en la previa había recibido el reconocimiento correspondiente al año 2022, en el que ya se alzó con el galardón. Tras el Alabaster y a corta distancia en las puntuaciones, el Viña el Pisón 2020 de la bodega Artadi y el Aro 2019 de Pablo Aro.

La bienvenida al evento corría a cargo de Paco Escánez, que recordó cómo hace veinte años un grupo de amantes de los buenos vinos, reunidos en el colectivo ‘Pagos Viejos’, se empeño en convertir a Almería y a Garrucha en uno de los templos de la enología. Recordaba a uno de los seis promotores, Antonio Rueda, recientemente fallecido “que nos enseñó a muchos a beber y a amar el vino”, y cuyo relevo ha sido dignamente asumido por su hijo, también Antonio.

Festival enológico y gastronómico
Pero en el Escánez no sólo hubo vinos y catas, también un lujo gastronómico, porque para los especialistas que se desplazan cada año a la localidad del levante almeriense, la Cata se ha convertido en una cita ineludible. A la mesa enólogos reconocidos a nivel nacional e internacional como el propio Marcos Eguren, el multipremiado Agustín Santolaya, director general de Bodegas Roda, Tony Pérez, de la firma Gramona, autora de los mejores cavas del país, y mitos de la gastronomía como las empresas de jamones Joselito o los quesos de La Antigua, entre otros.

Todos ellos se reconocen como ‘fans’ de la Cata de Garrucha porque encuentran en ella los mejores vinos del país, el mejor jamón, los mejores quesos, una carta basada en los tesoros que el mar regala a los garrucheros y a quienes los visitan, desde las gambas rojas y blancas a esos galanes convertidos en un símbolo para los amantes de la buena mesa.

Cita en Almería
Agustín Santolaya, que con su Cirsion es el bodeguero español que más veces ha obtenido el reconocimiento como mejor vino de España en esta cata garruchera, destacaba por encima de los premios que venir a Almería “es todo un placer porque se ha convertido en una estación clave en ese camino que hemos de recorrer cada año con nuestros vinos. Todos nosotros tenemos una parte del corazón en la casa de los Escánez”.

A decir de los asistentes, tanto los profesionales de la enología y la gastronomía como los que llegan para calificar los caldos seleccionados para la Cata, este es un punto de encuentro clave en el devenir de un sector que goza del vino y de una comida especiales, de tintes míticos en muchos casos. Pero por encima de todo destacan el extraordinario ambiente que se genera en torno a este evento que nadie quiere perderse. Marcos Eguren, el triunfador de este año, afirmaba que ganar es un placer “pero no por el premio en sí, sino porque eso significa que, como ganador, volveré el año que viene a esta casa y a esta tierra”.

Reconocimiento, a lo largo de la jornada, a un personaje que fue clave en la institución de esta Cata como Antonio Rueda, que siempre defendió que el mejor vino “es el que se comparte con la gente que te importa, el que has bebido en esos momentos mágicos en los que compartes mucho más que una copa”. La celebración de este evento tiene de alguna manera el sello personal de Distribuciones Rueda que hoy gestiona con acierto su hijo Antonio.