Caridad procesiona con la sobriedad del Viernes Santo

Quizás el viernes se dibujó demasiado castellano, más que andaluz Galería de imágenes

Procesión de Caridad, el Viernes Santo en Almería.e;clip:rect(4
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José Luis Laynez
01:00 • 20 abr. 2014

La Humilde Hermandad de San Francisco de Asís y Cofradía de Nazarenos del Santísimo Cristo de la Caridad en su Traslado al Sepulcro, María Santísimo de las Penas y Santa Marta, conocida popularmente como Caridad, salió puntualmente del templo de San Agustín a las 20.45 horas de una tarde apacible, como el resto de la semana.




Cofradía de luto y silencio, sólo podía escucharse en su desfile procesional la música de la Capilla Musical de Viento y cantaban las voces del Cuarteto Anacrusa. Alternaban sus actuaciones y en la puerta de las iglesias por las que pasaban, entonaban ‘Christus factus est’. No faltaron las saetas de El Morato en Plaza Virgen del Mar. 




Por el portón del templo de San Agustín,  conocido en Almería muchos años como los Franciscanos, ganó el cortejo Rambla Alfareros. Abría la Cruz Guía, con dos faroles a ambos lados. Luego iban la guardería, la bandera y cuatro báculos. Seguían el Libro de Reglas, de cuero bellamente repujado, la bacalá, el ya citado grupo de música de capilla y cuarteto vocal Anacrusa. Seis ciriales y la cruz parroquial servían de pórtico al único paso que lleva esta procesión, el Cristo de la Caridad.




Representa el final de la presencia humana de Cristo en la tierra, muerto y trasladado al Santo Sepulcro envuelto en una sábana blanca como mortaja. Otras figuras que aparecen en el paso son José de Arimatea, Nicodemo, Juan Evangelista e, inclinada a sus pies, María Magdalena. Detrás se sitúan la comitiva fúnebre junto a la Cruz, de la que pende el Santo Sudario y las escaleras así como las santas mujeres María Salome y María Cleofás, Santa Marta, en actitud consoladora junto a María Santísima de las Penas.




El paso iba sobriamente ornamentado con iris morados y flanqueaba la iconografía cuatro candelabros en los extremos. Treinta penitentes formaban las dos filas, de riguroso color negro, al igual que los velones que portaban apoyados en la cintura.




La llegada a Carrera Oficial se realizó con puntualidad, a las 23 horas, para dirigirse a San Agustín donde se recogieron a medianoche.




Demasiado sobrio el Viernes Santo




Ya sé que el Viernes Santo es día de luto y recogimiento. Pero quizá las tres procesiones que hacen salen ese día dan una imagen de la Semana Santa de Almería más castellana que andaluza. Caridad, con música de capilla; Entierro, con música sólo en un paso; y Soledad, ausencia total de sones. Demasiado tenebrismo para Almería



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