La delegada territorial de Educación, Francisca Fernández, y el director de Almería Acoge, Juan Antonio Miralles, han presentado la exposición ‘Stop Estigmatización’, una muestra fotográfica incluida en la programación de actividades con la que la asociación celebra su trigésimo aniversario. Las imágenes, instaladas en el hall de la Delegación de Educación, reflejan escenas de la vida diaria de los barrios almerienses de El Puche y La Fuentecica con el objetivo de romper tópicos y estereotipos negativos.
La exposición, y la publicación que la acompaña, son el resultado del trabajo que durante meses miembros de la asociación Almería Acoge y vecinas y vecinos de ambas barriadas de la capital han realizado para combatir con imágenes otras que se mantienen, tanto en la realidad como en el imaginario colectivo de la ciudad, estigmatizando a estas barriadas y a las personas que las habitan.
Este proceso de estigmatización provoca que los barrios o los colectivos que lo padecen sean aislados más aún del resto de la población, su imagen se distorsione y los procesos de rechazo provocados por el desconocimiento y el miedo alimenten el círculo vicioso de la exclusión. El proyecto ‘Stop Estigmatización’, desarrollado por Almería Acoge con el apoyo de la Dirección General de Coordinación de Políticas Migratorias de la Junta de Andalucía, pone de relieve los aspectos positivos de la vida diaria de las personas y colectivos de estos barrios. Estas fotografías intentan destacar las actitudes y actividades que los vecinos y vecinas están viviendo en contraposición a esa estigmatización de la que son víctimas.
La metodología de trabajo ha consistido en la identificación de los estereotipos que encasillan a cada uno de estos barrios, así como de valores existentes entre los vecinos que se contraponen a esos estereotipos. Todo ello, desde la participación y la implicación de los auténticos protagonistas, las vecinas y vecinos afectados, para lanzar esta campaña de comunicación que frene su estigmatización. Han sido numerosos los grupos de mujeres, de niños y niñas y de jóvenes que han participado en el análisis de la realidad de sus barrios y la constatación de la imagen que de ellos mismos tiene el resto de la ciudad. Han trabajado juntos la realidad y los estereotipos, los miedos y los problemas, pero también las potencialidades, la capacidad de trabajo y los deseos de hacer mejores sus calles, sus plazas, sus casas y sus vidas.
La educación, un instrumento de transformación social
En la presentación de la exposición, la delegada de Educación de la Junta, Francisca Fernández, ha destacado ‘el compromiso de Almería Acoge a lo largo de toda su larga trayectoria con la atención integral de personas que llegan a nuestra provincia en busca de una vida digna para sí y para su familia’. De manera especial, ha enfatizado el valor de la cooperación entre la asociación y el área de Compensación Educativa de la Delegación de Educación ‘con el objetivo común de lograr que nuestros centros educativos sean auténticas comunidades inclusivas de aprendizaje y de convivencia’.
Fernández ha valorado positivamente la labor de Almería Acoge en el ámbito de la educación y ha señalado ‘su participación en diversos programas educativos y las investigaciones de campo que han llevado a cabo y que, posteriormente, han servido para desarrollar actuaciones como las clases de español para el alumnado inmigrante’. Por su parte, el director de Almería Acoge, Juan Miralles, ha explicado que ‘si consideramos que hay un asunto clave para la transformación social que nos exige la realidad de diversidad cultural de nuestra provincia, es el de la educación’. ‘Por eso Almería Acoge se ha esforzado siempre por apoyar y colaborar con el gran reto y la gran labor que realizan los centros educativos de Almería, y por eso creemos tan importante que este trabajo contra la estigmatización y los estereotipos sea visible en estos espacios’, ha destacado.
Almería Acoge pretende facilitar la plena inserción escolar de los alumnos y alumnas inmigrantes ayudando a superar las situaciones de desventaja que puedan surgir por desconocimiento de procedimientos administrativos, por lagunas educativas o déficit en destrezas comunicativas de los alumnos. Para ello oferta información y acompañamiento a las familias y los centros de enseñanza tanto para matriculación como para el acceso a prestaciones sociales relacionadas; apoyo para el tratamiento de dificultades educativas específicas y, especialmente, acciones de mediación preventiva (sensibilización, apoyo a la convivencia) como en conflictos que puedan tener base cultural o social. Al mismo tiempo, oferta su saber acumulado para la consecución de un espacio educativo transformador que camine hacia una sociedad intercultural que se apoye en la presencia de otras realidades culturales como ocasión para el enriquecimiento.
Hoy día se desarrolla, en colaboración con la Consejería de Educación de la Junta, un programa específico de mediación intercultural con tres líneas de actuación principales: las intervenciones para la resolución de conflictos de carácter intercultural, la mediación preventiva para evitar futuros conflictos interculturales y la transformación institucional para garantizar la eficacia del trabajo con el propio centro, implicando a los docentes y a la administración y animando a las familias a participar en el centro. Se trata de abrir el centro a la sociedad y que la sociedad se implique en ellos.
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