Sesenta ‘Emociones de una vida’ al óleo

Vivencias, momentos, paisajes, viajes pero, sobre todo, sentimientos, quedan plasmados en cada una de las obras que componen ‘Emociones de una vida’. Con los trazos de su pincel, en óleo y sobre lienzo, su autor, el pintor almeriense Agustín Sánchez ‘Garren’, ha materializado los momentos más importantes de su trayectoria vital. 

Cada cuadro tiene un trasfondo con pequeñas historias que han marcado su vida, sirviéndose de la inspiración que le proporciona todo lo acontecido en su día a día, de la música, de los viajes y de su musa, María. 

“La última exposición es la mejor, porque me olvido del pasado y del futuro, vivo el presente. Esta es la mejor exposición de mi vida, con mis momentos especiales y las personas por mí queridas”, reconoce el autor. Así, explica que han sido muchos los factores que han influido en pintura. “Mi familia, mis amigos cercanos y los de fuera de las fronteras me han animado y ayudado, han estado junto a mí”, relata Garren. 

La belleza de Almería
Almería no deja de ser una fuente de inspiración para el autor almeriense. Los sentimientos que le evocan la belleza de la capital se han sumado al conjunto de la exposición con cuadros en los que se pueden ver reflejados muchos rincones de Almería, en su mayoría a través de colores melancólicos, en los que cobra un significado especial el mar.

Varios emplazamientos que son sellos de identidad en la capital han quedado retratados, vinculados a los sentimientos de Garren. Así, desde el Arrecife de las Sirenas hasta la Alcazaba, pasando por el faro de Almería o el Cable Inglés, se aúnan en uno de sus cuadros como un reconocimiento de lo que han implicado para el autor en sus momentos clave.

También en un tono melancólico, “una barca pesquera regresa a Pescadería”, explica el autor, refleja el espíritu de esta ciudad y la importancia que reviste para ella esta actividad. No obstante, otros lugares que también han formado parte de su vida se reflejan en sus obras, entre ellos Granada, la segunda ciudad donde expuso. Y sus viajes más destacados, como Canadá o Venecia también quedan incluidos. 

Son muchos y muy diversos los motivos, algunos con mayor importancia para él. Es el caso de los payasos, que brotan de una experiencia con marionetas en Montmartre y uno de los cuales da nombre a la exposición. O los músicos, que hablan principalmente a través de la mirada. Y, a su forma, los paisajes invitan a que “el espectador pueda sumergirse y participar en ellos”, tal como expresa el propio autor. Finalmente, María: “Mi compañera, mi amor y parte de mi vida”, ilustrada en una obra de pensamientos profundos que, al mirarla, transmite una paz especial. 

Se trata de una exposición que consta de 60 obras, ordenadas de forma indistinta porque “las vivencias no van unidas”, tal como cuenta el autor, y que se inaugurará hoy viernes a las 20 horas en el Museo de Almería.