“En unos años la gestación subrogada será tan natural como donar óvulos”

En los seis años que lleva en el laboratorio de reproducción asistida del Hospital La Fe de Valencia, el equipo del que forma parte el embriólogo almeriense Nacho Iniesta ha contribuido a traer al mundo a unos 3.500 bebés, a los que habría que sumar otros tantos en el tiempo en que trabajó en la sanidad privada. Entre ellos hay casos especiales en los que se obró el ‘milagro’ de la Medicina.

¿Qué hace un embriólogo?
Es el profesional que trabaja dentro de un laboratorio de reproducción asistida. Trabajamos fecundando óvulos, que obtenemos tras una estimulacion ovárica, con espermatozoides y obteniendo embriones que cultivamos en el incubador durante varios días.

¿Cuántos niños ha traído al mundo?
En el Hospital La Fe de Valencia somos un equipo de siete embriólogos que hacemos de todo. Mientras uno prepara una congelación, otro compañero hace una transferencia, otro hace una punción, otro procesa el semen para elegir los mejores espermatozoides, otra persona se encarga de fecundar los óvulos… Todos participamos a partes iguales, cambiando de puesto cada semana. Han nacido aproximadamente 3.500 bebés en los últimos seis años de pacientes de nuestro laboratorio.
 
¿Hay algún caso del que se sienta orgulloso?
Claro, muchos casos. Por ejemplo algunos amigos, que han tenido sus hijos con nosotros, pero sobre todo de pacientes del grupo de preservación de la fertilidad del que formo parte. Generalmente, pacientes con cáncer que se congelan los óvulos antes de empezar con la quimioterapia. Me acuerdo sobre todo de Nuria, una chica a la que se le diagnosticó un cáncer de mama y que, por diversas razones, no podía estimularse los ovarios. Solo podíamos obtener un óvulo por ciclo. Al final, todo salió bien, superó la enfermedad y ella y su marido tienen un niño precioso, Gonzalo.

Se obró el ‘milagro’ de la Medicina...
Sí. También tenemos varios nacimientos de bebés cuyo padre, antes de fallecer, congeló semen y dejo autorizado su uso post-mortem.

¿Los jóvenes de hoy nos hemos vuelto demasiado egoístas para dedicar nuestro tiempo a la crianza?
Creo que no. Ahora la edad en la que nos convertimos en padres o madres se retrasa por una cuestión laboral. Dedicamos parte de nuestra juventud a formarnos y encontrar un buen trabajo. Si una pareja intenta tener un bebé con 35, en caso de que se plantee algún problema no se dan cuenta hasta que no han pasado 2 ó 3 años y se plantan en los 38, cuando es aún más difícil.

¿Que riesgos plantea ser madre a partir de los 35?
A partir de los 35 años, la cantidad y la calidad de los óvulos disminuye. Y este descenso es mucho mayor a partir de los 40. Aquí la parte genética es determinante, siendo cada vez más complicado tener embriones sanos conforme se cumplen años. Por otra parte, los riesgos durante el embarazo y el parto aumentan también con la edad.

Animo a las chicas que quieren ser madres, tengan la edad que tengan, a ir a su ginecólogo o visitar los centros de reproducción asistida para que conozcan su reserva ovárica y  se asesoren bien. 

Además, la opción de recibir una donación de óvulos siempre está presente si los propios no valen.
 
¿Es descabellado que se dé a medio-largo plazo un escenario de tan escasa fertilidad como el que plantea ‘El cuento de la criada’?
En España, una de cada seis parejas tiene problemas de fertilidad, y eso no significa que no puedan ser padres. La natalidad es baja, pero no llegará a los niveles de las series de ciencia ficción.
 
¿Considera ético poder seleccionar el sexo de un bebé?
Los bebés a la carta no existen. No se puede seleccionar el color de los ojos ni la altura. La ciencia no avanza en esa dirección, por lo que técnicamente es imposible. Sí que intentamos que los bebés nazcan libres de enfermedades heredadas de sus padres.

Respecto al sexo, me parece ético siempre y cuando sea para evitar una enfermedad genética. Por ejemplo, si el bebé es niña no padece esa enfermedad, y si es niño, muere o tiene una calidad de vida muy mala. En ese caso veo ético y lógico transferir un embrión del que nacerá una niña. Si es por otro motivo, como que los padres quieren un determinado sexo, estoy totalmente en contra, ya que lo que haríamos es descartar embriones sanos solo por su sexo.

¿Qué opina de la gestación subrogada?
Estoy a favor siempre que se haga bien y por motivos médicos. En unos años será tan natural en España como donar óvulos. Eso sí, hay que tener en cuenta a ambas partes: la mujer o pareja que quiere ser madre y no puede y la mujer que gesta el bebé.