Antonio Crisol
23:26 • 02 oct. 2011
Si el pasado año fue el VIII Encuentro Andaluz de Acuarela, en esta ocasión han sido las I Jornadas Internacionales “Vélez Blanco: la Joya del Marquesado” las que han congregado en este monumental rincón del norte de la provincia a casi una treintena de acuarelistas procedentes de Andalucía, Madrid, Valencia y el País Vasco.
Un nutrido número de artistas que tomaron las calles el pasado fin de semana para inmortalizar en sus lienzos la luz, el colorido, el perfil señorial, la majestuosidad, el sinuoso trazado y la esencia de uno de los pueblos con más solera de Almería.
Un escenario “de película” con una larga y prolífica historia que atestiguan colosales construcciones como el Castillo de los Fajardo, la Iglesia de Santiago o el convento de San Luis, que se convirtieron durante estos dos días en “obligados modelos” para los amantes de un arte, que con la rapidez que exige la técnica utilizada, pretende captar instantes con vocación de permanencia.
El trazado serpenteante del barrio morisco, los barrancos que lo atraviesan, las fuentes que no dejan de manar agua y las elevadas montañas que flanquean la vega y el centro urbano, declarado conjunto histórico artístico, también sirvieron de arquetipo para las hábiles y rápidas manos de los artistas llegados desde distintas partes de España.
La jornada inaugural de este evento, celebrada durante la comida del sábado, estuvo presidida por el concejal de Cultura, Dietmar Roth, que agradeció a los participantes su presencia con la que contribuyen a ser “embajadores de esta tierra”. También estuvieron en el acto varios miembros de la junta directiva de la agrupación organizadora.
No faltó, Pepe Ros, que ostenta la vocalía de Almería de la Agrupación de Acuarelistas de Andalucía, que con la colaboración del Ayuntamiento, ha sido la encargada de organizar esta jornada pictórica, que pretende consolidarse como un encuentro para la inspiración en el que los artistas participantes compartan técnicas y conocimientos.
Luz y color
La monumentalidad y la luz de este rincón de los Vélez ha dejado impresionados, según sus propias palabras, a la mayor parte de los acuarelistas participantes que cada tarde reunieron sus obras para mostrarlas en una exposición organizada en la Galería Estudio La Concepción.
Destacaron los autores la dificultad de esta técnica algo desconocida y a veces, poco valorada en las universidades, donde se trata como un arte menor, pero que apasiona a cuantos este fin de semana se acercaron a Vélez Blanco con otro objetivo, despertar el interés por una disciplina de gran belleza.
Como actividades paralelas se ha ofrecido a los artistas presentes una visita guiada por el centro histórico de esta localidad y otra a la Cueva de Los Letreros, con pinturas rupestres declaradas Patrimonio de la Humanidad.
Los acuarelistas también han podido disfrutar de la gastronomía velezana con comidas y cenas servidas en los mejores restaurantes del pueblo, que se aprovecharon además para el intercambio de acuarelas entre los artistas.
Un nutrido número de artistas que tomaron las calles el pasado fin de semana para inmortalizar en sus lienzos la luz, el colorido, el perfil señorial, la majestuosidad, el sinuoso trazado y la esencia de uno de los pueblos con más solera de Almería.
Un escenario “de película” con una larga y prolífica historia que atestiguan colosales construcciones como el Castillo de los Fajardo, la Iglesia de Santiago o el convento de San Luis, que se convirtieron durante estos dos días en “obligados modelos” para los amantes de un arte, que con la rapidez que exige la técnica utilizada, pretende captar instantes con vocación de permanencia.
El trazado serpenteante del barrio morisco, los barrancos que lo atraviesan, las fuentes que no dejan de manar agua y las elevadas montañas que flanquean la vega y el centro urbano, declarado conjunto histórico artístico, también sirvieron de arquetipo para las hábiles y rápidas manos de los artistas llegados desde distintas partes de España.
La jornada inaugural de este evento, celebrada durante la comida del sábado, estuvo presidida por el concejal de Cultura, Dietmar Roth, que agradeció a los participantes su presencia con la que contribuyen a ser “embajadores de esta tierra”. También estuvieron en el acto varios miembros de la junta directiva de la agrupación organizadora.
No faltó, Pepe Ros, que ostenta la vocalía de Almería de la Agrupación de Acuarelistas de Andalucía, que con la colaboración del Ayuntamiento, ha sido la encargada de organizar esta jornada pictórica, que pretende consolidarse como un encuentro para la inspiración en el que los artistas participantes compartan técnicas y conocimientos.
Luz y color
La monumentalidad y la luz de este rincón de los Vélez ha dejado impresionados, según sus propias palabras, a la mayor parte de los acuarelistas participantes que cada tarde reunieron sus obras para mostrarlas en una exposición organizada en la Galería Estudio La Concepción.
Destacaron los autores la dificultad de esta técnica algo desconocida y a veces, poco valorada en las universidades, donde se trata como un arte menor, pero que apasiona a cuantos este fin de semana se acercaron a Vélez Blanco con otro objetivo, despertar el interés por una disciplina de gran belleza.
Como actividades paralelas se ha ofrecido a los artistas presentes una visita guiada por el centro histórico de esta localidad y otra a la Cueva de Los Letreros, con pinturas rupestres declaradas Patrimonio de la Humanidad.
Los acuarelistas también han podido disfrutar de la gastronomía velezana con comidas y cenas servidas en los mejores restaurantes del pueblo, que se aprovecharon además para el intercambio de acuarelas entre los artistas.
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