Desde este martes 1 de octubre, opera en Almería el grupo internacional de salas de cine Kinépolis. Lo hace tras ocupar las diez pantallas del Centro Comercial Mediterráneo que durante 24 años han llevado el nombre de Cines Monumental. Un complejo que desde su apertura, en junio de 2000, cambió la forma de disfrutar del séptimo arte con una serie de innovaciones que ahora consideramos comunes, pero que en su momento fueron toda una revolución.
¿Qué aportaron los Monumental en la manera de ir al cine en la Almería del final del siglo XX? ¿Cuántas salas había en la ciudad cuando abrieron? ¿Con qué películas se presentaron al público almeriense? ¿Y qué otros títulos copaban las carteleras de la ciudad?
Los Cines Monumental abrieron sus puertas al público en la tarde del viernes 23 de junio de 2000, aunque la noche anterior se pusieron de largo en un acto social. Este nuevo complejo prácticamente duplicó la oferta cinematográfica de la ciudad, que pasó de contar con trece salas a tener veintitrés pantallas. Gestionados por la empresa Sintagmo, su propietario, Juan Asensio, los bautizó así en homenaje al cine que su padre, Juan Asensio Artés, abrió con el mismo nombre en el Barrio Alto de la capital en 1955. Aquel primer Monumental cerró sus puertas a principios de los años 80.
El nuevo Monumental, un aliciente más para el Centro Comercial Mediterráneo, inaugurado en diciembre de 1998, contaba con una decena de salas y un aforo total de casi 2.300 butacas. Del proyecto se encargaron la arquitecta Gádor Rodríguez, el aparejador José Diego Sánchez y el ingeniero Juan Álvarez.
La sala 4 destacó desde el primer momento por tener la pantalla más grande de Almería y una de las diez más grandes de toda España, con unas dimensiones de 16,5 metros de ancho por 6,5 metros de alto. Además, estaba equipada con sonido triamplificado, una característica única en la ciudad, solo comparable a la fabulosa y añorada sala 4 del Imperial, cuya pantalla era también considerable, aunque de ancho era cinco metros más pequeña.
El complejo también presumía de una disposición de asientos en grada con una inclinación del 30%, lo que permitía una visión despejada sin que la cabeza del espectador de enfrente interfiriera. Cada asiento incluía reposacabezas, reposabrazos individuales con espacio para bebidas y una generosa separación de 90 centímetros entre asientos, proporcionando un mayor confort y poder estirar las piernas con comodidad.
Otra de las grandes novedades que trajeron los Cines Monumental a aquella Almería del 2000 fue la posibilidad de comprar entradas por internet, algo que solo ofrecían una treintena de cines de España. Adiós por tanto a las colas y hola a la posibilidad de seleccionar asiento y fila con antelación, gracias a la numeración de las butacas.
Las películas
Los Cines Monumental encendieron sus proyectores con diez largometrajes: 'Con sangre y fuego', 'Gladiator (El gladiador)', '28 días', 'Misión a Marte', 'Cero en conducta', 'La chica de al lado', 'Aquí en la Tierra', 'Krampack', 'Bats (Murciélagos)' y 'Mirka'.
En las primeras sesiones de la tarde de aquel viernes veraniego, con el curso escolar recién concluido, mucho público joven. La película de ciencia ficción 'Misión a Marte' y la comedia de instituto 'Cero en conducta' fueron las más demandadas, contaba LA VOZ en ese momento.
Otros cines
En la actualidad Almería carece de cines comerciales fuera de las grandes superficies: a los Kinépolis Almería Mediterráneo (esta es su denominación) se suman los Yelmo Torrecárdenas, ambos ubicados en centros comerciales.
Sin embargo, en junio de 2000, la situación era muy diferente. Aún existían salas ubicadas en pleno centro de la ciudad. El cine Imperial, por ejemplo, contaba con cuatro en la Avenida Pablo Iglesias: tres en una acera y la mítica sala 4 enfrente. Entonces proyectaban 'Cero en conducta', 'Campo de batalla: La Tierra', 'Tango para tres' y 'Gladiator (El gladiador)'.
El Teatro Cervantes, en la calle Poeta Villaespesa, junto al Paseo, exhibía 'Misión a Marte', mientras que los cercanos Minicines Hesperia, con tres pequeñas salas en la calle General Segura, ofrecían 'Destino final', 'Cascabel' y 'Generación perdida'.
En la calle González Garbín se encontraba Roxi Cinema con una sala grande y otra más pequeña en un bajo en las que podían verse 'Stuart Little', 'Soñé con África' y, en pase de medianoche el viernes y el sábado, 'Bossa Nova'. Y en Plaza del Monte, donde actualmente se encuentra la Gerencia Municipal de Urbanismo, el restaurante El Terrao y un aparcamiento, se levantaba Centro Cine con sus tres salas: daban 'Gladiator (El gladiador)', 'Lista de espera' y 'Buena Vista Social Club'.
Fuera de la capital, en Aguadulce, aún funcionaban las cinco salas de los Minicines Chaplin: el público podía ver allí 'Tierra de fuego', 'B. Monkey', 'Golpe a traición' y 'Mansfield Park compartiendo pantalla, 'Misión a Marte' y 'Destino final'. Y al ser verano ya habían abierto las Terrazas Aguadulce con cuatro pantallas y sendos programas dobles: 'Alta fidelidad' y 'Gigoló'; 'American Pie' y 'Abierto hasta el amanecer 2'; 'Tarzán' y 'Los secretos de la inocencia'; y 'Secuestrando a la señorita Tingle' y 'Cielo de octubre'.
En El Ejido, en el Centro Comercial Copo, estaban los multicines con ese nombre (siguen abiertos, pero hoy son parte del grupo Ocine): cinco pantallas donde los espectadores se encontraban con 'Stuart Little', 'Misión a Marte', 'Campo de batalla: La Tierra', 'Destino final' y 'Gladiator (El gladiador)'.
En otras localidades de la provincia, especialmente en el Levante almeriense, también había cines, aunque funcionaban solo al final de la semana y con horarios limitados.
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