Gorka Otxoa “La gala tendrá momentos de comedia y vacile y otros poéticos y bonitos” l

Lleva con orgullo la etiqueta de ‘pagafantas’, que se ganó gracias a su primer papel protagonista en el año 2009 a las órdenes de Borja Cobeaga. Dos años antes ya había compartido set de rodaje con este realizador, precisamente en uno de los poblados del cercano oeste almeriense, donde se localizó el cortometraje ‘Limoncello’, producido a través de uno de los premios de ‘Almería en Corto’.

Gorka Otxoa (San Sebastián, 1979) vuelve esta noche al Festival de Cortos como maestro de ceremonias de la gala de clausura. Sobre el escenario del Auditorio Maestro Padilla contará con dos pesos pesados de la tierra, el guitarrista Tomatito y la Orquesta Joven de Almería (OJAL).

Hoy ejerce como maestro de ceremonias de la clausura de ‘Almería en Corto’. ¿Cuál es su receta para afrontarlo?
Lo afronto con mucha ilusión. Es un festival importante que ya lleva muchos años. Además es internacional, por ahí ha pasado mucha gente destacada.

¿Qué ingredientes se han tenido en cuenta a la hora de confeccionar el guión?
Javier Ruiz Taboada es el autor del guión, que además ha escrito de forma brillante. El director del festival [Luis Serrano] dice que es el mejor de los últimos años. Tiene momentos de comedia, de ironía, de mucho vacile. Y también otros poéticos y bonitos, pues incluye muchas metáforas. Es perfecto para impedir que la gala sea una chapa o demasiado larga, que es el principal peligro.

Participó en el corto ‘Limoncello’, financiado gracias a un premio de ‘Almería en Corto’. ¿Cómo recuerda esa experiencia, Almería y el propio festival?
Esa es mi conexión con el festival. El corto lo dirigió Borja Cobeaga, con el que luego repetí en ‘Pagafantas’. Estuvimos grabando en uno de los poblados del oeste y fue una experiencia muy chula, aunque mi papel era pequeñito. ‘Limoncello’ era una mezcla de tres cortos de tres directores en uno solo.

Cobeaga viene al festival a hablar de su salto al largometraje. ¿Qué supone este salto desde el punto de vista del actor?
Sí, yo voy a estar con él en esa actividad. Antes de ‘Pagafantas’, que fue mi primera película como protagonista, había hecho papeles en otras. Así te vas familiarizando, vas varios días a grabar y eso. El salto al largo te hace estar todos los días al pie del cañón y requiere más concentración y más energía, aunque en el fondo es lo mismo. De hecho, hay cortos con un nivelazo impresionante.

El público está acostumbrado a verle en su faceta más cómica, en ‘Vaya semanita’, ‘Pagafantas’. ¿Se ve interpretando un drama?
También los he hecho. Yo empecé haciendo un culebrón en Euskal Telebista (ETB) y en teatro he interpretado ‘Hamlet’ o un asesino loco en ‘La ratonera’. Intento compaginar proyectos que tienen más drama, aunque hago lo que más me llega o me encaja. Me apunto encantado a todo lo que sean proyectos chulos.

‘Pagafantas’ le valió una nominación a los Goya y le dio a conocer ante el gran público. ¿Qué tiene ese papel que enganchó tanto? ¿Le llaman ‘pagafantas’ por la calle?
Sí, lógicamente. Y lo llevo con mucho orgullo. Fue una película muy buena, un regalo que me ofreció Cobeaga. Para algunos seré un ‘pagafantas’ para siempre. Todo el mundo se identifica con ese personaj