Miedo para todos los públicos en una concurrida ‘Noche del Terror’

Hace algo más de una década, Halloween era sólo una simpática fiesta norteamericana que conocíamos, e incluso envidiábamos, gracias al cine. Hoy puede decirse que se ha instalado completamente en nuestro país, impulsada en parte gracias a iniciativas como esta ‘Noche del Terror’ de Almería, que ayer volvió a llenar las calles del Casco Histórico de zombis, vampiros, fantasmas, calabazas andantes y otros seres de siniestra condición.

Iniciativa del área de Desarrollo Económico, Empleo y Nuevas Tecnologías del Ayuntamiento de Almería, la empresa municipal Almería Urban y las concejalías de Turismo y Cultura, además de las asociaciones de comerciantes (Almería Centro), hosteleros (ASHAL) y cocineros (ACRIA), la ‘Noche del Terror’ ha ofrecido en su segundo año más de una treintena de actividades en el centro de la capital. Además, más de un centenar de comercios se han adherido a la propuesta con descuentos, promociones y horarios ampliados.

En familia
Los más pequeños volvieron a ser los grandes protagonistas de una jornada que se consolida como el carnaval de otoño; eso sí, mucho más animado, colorido y familiar que el vetusto Don Carnal.

Un espectáculo de danza vertical abrió las propuestas culturales pasadas las ocho y veinte de la tarde aunque las actividades  de animación infantil comenzaron una hora antes en la Plaza de San Pedro.

Hubo teatro, música, talleres, puestos de dulces y complementos y un concurso de disfraces. El pasacalles de La Duda Teatro asustó entre risas a los viandantes mientras que la Charanga de LA VOZ puso la banda sonora a una ‘Noche del Terror’ que tuvo su epicentro en la Plaza Vieja su epicentro: llenazo en los bares, larga noche de ocio antes de honrar hoy a los difuntos.


El Túnel del Terror, en la web de LA VOZ
La gran novedad de este año ha sido el Túnel del Terror instalado en uno de los soportales de la Plaza Vieja. Varios centenares de personas hicieron cola desde las ocho de la tarde hasta las doce de la noche para introducirse en él y disfrutar a base de sustos. A la salida, un fotógrafo inmortalizaba los rostros de terror que hoy podrán verse  en la web de LA VOZ.