Con casi cuatro temporadas a las espaldas, ‘Delicatessen’ constituye una de las propuestas culturales más consolidadas del panorama almeriense. Diseñado a medida por la compañía Axioma para el Ayuntamiento de la capital, desde que se puso en marcha en enero de 2012 y hasta su última función, el pasado mayo, el programa ha llevado al Teatro Apolo alrededor de 36 laureados e innovadores espectáculos que escapan del circuito comercial. Sin embargo, un “problema presupuestario” ha interrumpido el ciclo este trimestre.
“Teníamos un problema presupuestario y como contamos con las propuestas del Programa Estatal Platea, que cubren la oferta de artes escénicas, pensamos que en caso de tener que suprimir algo lo mejor era optar por ‘Delicatesen’ que, además, se recuperará el próximo trimestre”, explica a LA VOZ la concejal de Cultura, Ana Martínez Labella.
A juicio de la edil, la programación para este otoño es “lo bastante amplia y densa como para que esta ausencia no se traduzca en una merma de calidad”. De hecho, Martínez Labella considera que algunas funciones del Platea “podrían enmarcarse a la perfección” en el ciclo que lleva el sello de Axioma.
Por su parte, el director de esta compañía y programador de ‘Delicatessen’, Carlos Góngora, está dispuesto a velar por mantener intacto el espíritu del proyecto, que con el paso del tiempo ha logrado fidelizar al público que el último jueves de cada mes llenaba el Teatro Apolo. “Cuando me reuní con la concejal de Cultura para iniciar el trimestre de final de año, me propuso buscar alternativas que yo no veía claras porque era romper el espíritu del ciclo y lo que no quiero es romper algo que funciona. Le dije que prefería esperar a los nuevos presupuestos y retomar la idea”, argumenta.
¿Y cuál es la esencia de ‘Delicatessen’? Son obras de pequeño y mediano formato de carácter innovador y alta calidad que normalmente no entran dentro del circuito comercial, “lo que no quiere decir que no tengan gran éxito entre los espectadores, que lo tienen”. “Creo que lo que demanda el público de ‘Delicatessen’ es justo eso porque lo otro, lo comercial, ya lo tienen en la programación del Auditorio Maestro Padilla. Y esto no significa que sea mejor o peor, sólo que es diferente”, reflexiona el histórico ‘teatrero’.
Para programar el ciclo del Apolo -que la revista especializada ‘Artez’ definió como “la mejor programación de artes escénicas del momento en España”-, el equipo de Axioma selecciona montajes que ha visto previamente en festivales. “Me consta que hay sitios donde lo están intentando copiar porque saben que es garantía de éxito”, comenta.
No en vano, el anterior concejal de Cultura, Ramón Fernández-Pacheco, presentaba cada edición de la iniciativa como el emblema de la programación capitalina.
Suma de voluntades
El teatro, la danza, el clown, las artes circenses, el humor, el monólogo, la revista y el género musical tienen cabida en este formato por el que han desfilado compañías con galardones como el Max y premios nacionales. “Este proyecto es la suma de muchas voluntades: de los artistas que vienen con cachés más bajos, del público que compra su entrada, del ayuntamiento que pone un dinero, de Axioma que también se juega el suyo y de LA VOZ y la SER que lo dan a conocer”, expone Carlos Góngora con la esperanza -compartida por los amantes de la cultura- de que esto sólo sea un hasta luego a ‘Delicatessen’.
Ideas que quedan en el tintero
La interrupción temporal del programa de artes escénicas ‘Delicatessen’ deja en el tintero ideas que su programador, Carlos Góngora, tenía en mente de cara al futuro del proyecto. Una consistía en intensificar la periodicidad de las representaciones en función de la demanda del público, de modo que en vez de una vez al mes éstas se desarrollasen cada quince días. Otra, crear ‘El gran Delicatessen’ en el Auditorio Maestro Padilla.
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