Una Almería que no volverá en ‘La hierba de ayer ya está crecida’

En 1959, el régimen franquista pone en marcha el Plan de Estabilización con el que el país se iba a desembarazar de dos décadas de autarquía. En aquel año “bisagra”, cuando comenzaba a llegar a la península “el aroma de una Europa que muchos no sabían ni que existía”, un niño recorre las calles de una Almería que hoy ya no existe. Una mirada a un tiempo perdido revisitado desde la experiencia vital del autor. ‘La hierba de ayer ya está crecida’ (Éride Ediciones), debut en la narrativa de Isidro Manuel Navarro Flores (Almería, 1947), se sirve de los ojos de Manuel, un chaval de diez años “tímido, sesudo y discreto”, pero “un niño al fin y al cabo”, para mostrar cómo eran Almería, Roquetas y Aguadulce en aquel tiempo. “Es una novela amable que transita por una época difícil”, apunta el escritor en conversación telefónica con LA VOZ.

El Café Cyrano de la capital acoge este jueves a las 19 horas la presentación del libro, que llegó a las estanterías el pasado 30 de diciembre. Elena Jaime de Pablos, profesora de Lengua y Literatura inglesa de la Universidad de Almería, acompañará a Navarro en la puesta de largo de ‘La hierba de ayer ya está crecida’, que hunde sus raíces en el costumbrismo. “Los lectores que tengan menos de cuarenta años descubrirán, por ejemplos, oficios o herramientas hoy desaparecidos”, dice.

Junto a Manuel, álter-ego del autor, y sus amigos de infancia aparecen de forma destacada su padre y su abuelo, dos faros. “El padre es el sostén del día a día, la honestidad; el abuelo es el referente ético, la base emocional, el origen, de donde todos venimos”.

Por las 360 páginas de ‘La hierba de ayer ya está crecida’ (19 euros) pululan además muchos personajes que entran y salen de la acción y que de alguna forma convierten a la historia en una “novela río”.

Quienes se han adentrado en ella destacan asimismo la minuciosidad y el detalle con que Navarro recrea la Almería de aquella época. “He leído mucho teatro y un dramaturgo lo primero que hace es describir cómo es el escenario. También son un referente lejano autores rusos, como Dostoyevski, que leí con unos dieciocho años”.

Tras esta primera incursión en la novela, Navarro Flores trabaja en un segundo título con el que recuperará a Manuel. Eso sí, en esta ocasión utilizará la primera persona y situará la acción veinte años después, en los setenta, otro momento crucial en la historia de España.

Una vida entre letras y números
‘La hierba de ayer ya está crecida’ es el primer título publicado de Isidro Manuel Navarro Flores aunque tiene otros inéditos. “Me gusta mucho investigar la II República, incluida la Guerra Civil, sumergirme en los archivos civiles, jurídicos y militares. Y tengo un poemario autoeditado”, confiesa. Fue subdirector de una entidad financiera durante cinco años, ocupó la dirección administrativo-financiera de una agencia de publicidad y ejerció la gerencia de la sociedad propietaria de LA VOZ. Desde 1988 se dedica al asesoramiento de empresas con despacho en la capital.