En la búsqueda de su nombre en Google se puede comprobar que incluso en eso este canario es una persona especial. La pantalla arroja un total de 5.210 páginas, una cifra muy baja para lo que suele encontrar este buscador sobre cualquier término que se le pida, y además todas las primeras entradas hablan sobre él y sus andanzas en el voleibol y el vóley playa. Arabisen, yendo un poco más lejos, tiene un significado concreto si se revisa la rica etnografía de su isla, ‘el salvaje’, lo que deja claro que su familia supo que nacía un espíritu libre y un guerrero. Sus raíces se hunden en Gran Canaria, de pura cepa, así que no ‘guanche’, sino ‘canarii’, de ahí ‘canarión’, pero siempre un gran abanderado de su tierra.
El joven receptor de Unicaja Almería vive su primera experiencia al máximo nivel estableciéndose en la península, porque previamente la Superliga ya lo conocía por su gran calidad en Vecindario. Eso sí, no es la primera vez que reside fuera, puesto que pasó por la Permanente de Palencia, pero ahora es su momento. Jornada 4 y debut ante el FC Barcelona, lo que esperaba con gran ilusión: “Estaba ansioso por que llegara este momento y con muchas ganas”. Hasta el sábado, se había hecho un recorrido severo, de esfuerzo y constancia, “sobre todo para intentar estar preparado para afrontarlo lo mejor posible y ayudar al equipo en todo lo que pudiese en el momento de salir al campo”.
Arabisen Rodríguez mantiene una actitud callada, habitual en los más inteligentes, en los que toman nota de todo con la cabeza y actúan en consecuencia. Dijo en su presentación que jugar en el tricampeón iba a suponer un antes y un después en su carrera, y sigue pensando lo mismo: “Hay jugadores de muy buen nivel en mi posición, con mucha calidad, pero yo sabía a lo que me exponía cuando venía, así que me lo tomo como un reto deportivo y personal para lograr una mejoría permanente, día a día, y tenerlos como referencias”. En ese sentido, el reto es oportunidad: “Me apoyo mucho en jugadores como Israel y Mario, que me ayudan bastante en los entrenamientos, y a mejorar”. La continuación es toda una ley de vida: “Trabajar muy duro, esperar las oportunidades y aprovecharlas al máximo”.
Tuvo la mala suerte de caer lesionado demasiado pronto el curso pasado, pero su espíritu luchador le llevó a acortar plazos mediante el esfuerzo en la recuperación. La recompensa fue entrar en el septeto ideal que realiza la Federación en dos de las cinco jornadas que disputó. Lo mismo hace ahora en Unicaja, este vez a modo de ‘horas extra’ en el gimnasio para ganar masa muscular. Considera, cargado de humildad, que estar peleando por un sitio en cancha con Israel Rodríguez, Mario Ferrera y Juanmi González “es un lujo”. Ante el Barça entró por el último de ellos y llegó su “primer punto de ataque”. En cuanto a sensaciones, las mejores: “Muy contento, estuve muy cómodo y me sentí uno más, bastante apoyado”.
Antes del comienzo del partido ya estaba feliz por saber que Vecindario había vuelto a hacerse fuerte para tumbar al segundo favorito que pasaba por Gran Canaria, el Ca’n Ventura, tras haberlo logrado también con CV Teruel. A Arabisen no le sorprende lo más mínimo: “La verdad es que no, porque han hecho una pretemporada muy buena, fueron a Portugal a jugar unos amistosos y de ahí llegaron directamente al primer partido de liga”. Es el mejor para analizar al equipo sensación del inicio del campeonato: “Está muy bien formado y se ha reforzado con un opuesto –Leandro Martins, MVP de esta jornada-, un central brasileño y otro central de la selección venezolana”.
No le cabe la menor duda de que “van a dar muchas sorpresas”, lo que ya está logrando desde el principio. El arranque contrario al de ACE Gran Canaria ha tenido Electrocash Cáceres, el próximo rival blanquiverde, pero Arabisen sabe muy bien que “esto no es como empieza sino como acaba”. Aún así, “les ha costado arrancar un poco y además en su casa cualquier rival puede convertirse en un obstáculo porque juega más cómodo, con su afición, acostumbrado a su parqué, a su campo de juego”. Ante ello, Unicaja planteará su guión habitual de cada fin de semana: “Saldremos a por todas, como siempre, y a hacerlo lo mejor posible”. Después llegará Ibiza y se agolparán las fechas importantes.
Una que aparece en el horizonte especialmente destacada es la disputa del primer título del curso, la Supercopa de España, en Teruel dentro de un mes, el día 7 de diciembre. Tres días antes Unicaja da la casualidad de que jugará en Vecindario, “cancha difícil y además este año se juega a las 12.30 horas, que no es habitual para los demás equipos”. Dentro del perjuicio de dos viajes seguidos, miles de kilómetros y no disponer de tiempo para entrenar, cabe lo positivo de que será un choque de nivel, “mucho más sabiendo que va acabando la primera vuelta y Vecindario va a buscar una victoria muy importante para meterse en la Copa del Rey, por lo que será un partido muy bonito y disputado”.
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