Carboneras celebra 26 años del mejor rugby

Hablar de rugby en la provincia de Almería, es hablar de Carboneras con 26 años a sus espaldas, años en los que la ilusión de un joven y reciente vecino de la localidad, Rafael Rodríguez, que llegó a captar niños para que aprendiesen a vivir de los valores que este deporte desprende. El escenario escogido fue la playa de los Cocones. Cientos de niños probaron y muchos de ellos introdujeron este deporte en  su corazón. Los primeros años fueron apasionantes y complejos, pero llegó la hora de competir, y ahí el alma carbonera  siempre contrarrestó la falta de medios técnicos y logísticos, la fuerza de un pueblo acostumbrado a estar aislado del mundo, se tradujo en equipos rocosos inferiores quizás a los grandes de este deporte en Andalucía, pero con sacrificio dentro del campo y hermandad fuera de el.

Toda una vida

Carboneras comenzaba a hacerse un hueco dentro de este deporte. En  junio del año pasado se organizo el 25 aniversario, con un torneo celebrado el día de San Antonio patrón de Carboneras. El torneo contó con equipos de Granada y Murcia. Se disputó en tres categorías: senior masculino y femenino y veteranos. Sirvió para juntar en el estadio Blas Belmonte a jugadores de todas la épocas y pasar una jornada marcada por el espíritu competitivo y terminado con una gran paella de hermanamiento para 400 personas. El rugby es un deporte que no para de crecer en toda la provincia, este deporte logra aunar unos valores de trabajo, esfuerzo y compañerismo que son un referente en la educación de jóvenes. En la actualidad Rugby Carboneras solo cuenta con equipo senior compitiendo en Segunda Andaluza y con el solo objetivo de volver a crecer. 

Juan Pedro Mateo

La vuelta a la formula original “de captación de niños para volver a formar las escuelas es una de las prioridades de la directiva”, comenta, Mateo, alma del club carbonero. “El deporte es un mundo donde se compite y donde no siempre se puede ganar, el rugby asocia de gran manera esto a sus valores, una vez terminado cada partido el equipo vencedor hace un pasillo de honor al equipo vencido, estos valores son los que queremos aplicar y entender a los jóvenes que próximamente decidan incorporarse a este proyecto”. 
La educación es sin duda una de las armas fuertes que transmite este deporte “muy alejado al individualismo y al protagonismo unipersonal”. Juan Pedro y Pedro José Venzal trabajan de la mano por un rugby mejor cada día.