Primer empate de URA

Es posible que sea una de las crónicas de partido más complicadas de hacer visto lo visto sobre el césped del Emilio Campra. Llegó Alcobendas B sin exceso de confiana la disputa de un partido en el que URA tenía la obligación de ganar para acercarse algo más a la permanencia. No fue así, pero al menos se sumaron dos puntos que dejan a los ‘cruzados’ siete sobre descenso directo y a tres de la tranquilidad absoluta. Tras el partido, rostros largos y sabor un tanto amargo, ya que se entendió que la victoria debió ser local, pero el mérito del empate se empieza a ver mejor con algo más de perspectiva. Cayeron Helvetia, Ingenieros Industriales y Atlético Portuense, eso para empezar.

El equipo madrileño es el tercero de la tabla, muy complicado en todos las facetas del juego, pero sobre todo realmente rocoso a la hora de hacerle algún punto. Con todo, dispuso Unión Rugby Almería de tres patadas a palos para haber abierto la lata en la primera parte, ninguna de ellas bien dirigida. Además de eso, hubo muchísimos minutos de juego en la 22 contraria, pero Alcobendas defendió y los unionistas se toparon una y otra vez con un muro pese a tirar de paciencia para encadenar fases. El primer golpe de castigo llegó tras estar a cinco metros del try en el minuto 5, el segundo tras una melé en el minuto 12 y el tercero en la última jugada antes del descanso, más distante.

No se puntuó de ningún modo, y eso que en varias ocasiones se cantaba el ensayo, como en el 17 gracias a una gran progresión de Antonio Manchón por la izquierda, y después encadenando hacia la derecha. Los madrileños sufrían sabiendo hacerlo, sin ataque hasta el minuto 36 aprovechando una patada defensiva. URA se mantenía firme en las estáticas, y apareció Ismael Varas para hacer una gran defensa. La sensación era la del trabajo bien hecho ante un grande, sin la suerte de cara para haberse ido al intermedio con una buena distancia de puntos. No fue así, y además se esperaba un bajón físico del rival en la segunda mitad que no llegó, sino todo lo contrario.

El alto ritmo de juego de los cruzados empezó a pasar algo de factura, pero antes hubo tiempo de rozar otra vez más el ensayo en la primera jugada con una jugada de Gaspani. De un modo encomiable, Alcobendas dio un paso al frente viendo que Unión Rugby Almería bajaba algo el ritmo, y entonces se entró en una fase de cuerpo a cuerpo que extendió aún más el 0-0 inicial de un modo sorprendente. No es un marcador demasiado propio de este deporte, pero es posible y se demostró. Un error de los madrileños en una entrada por la izquierda, con un pase a la mano que se fue, resultó providencial para no poner un resultado en contra.

Se entró en el momento decisivo y cualquier cosa podía pasar, si bien URA tenía algo más que Alcobendas por mucho que el conjunto rival fuera capaz de taparlo. Dos errores decidieron que el partido tenía que ser de empate. Primero Lucas Melián interceptó un pase en campo propio y esprintó hacia la zona de ensayo, tirándose en plancha y anotando bajo palos. Era el minuto 70 y Juan Graciarena puso el 7-0. Había que echar cabeza, pero no hubo tiempo ni de pensarlo. En la patada de saque se produjo un error unionista que dio una touch dentro de la zona de cinco, y el apertura visitante depositó tras tres fases de juego. Se transformó y se estableció el 7-7.

Quedaban 9 minutos, y se pudo ganar al tiempo que se pudo perder. Estuvo algo más cerca lo primero, pero la mala suerte se cebó con los unionistas con un balón escurrido cuando había pista libre hacia la zona de marca en la última jugada del choque. A Pablo Jiménez no le sentó nada bien el fluir de los acontecimientos en una primera instancia, si bien después reconoció la gran importancia de los puntos: “Hemos empezado muy bien, con intensidad y metiéndonos en campo contrario, con una cosa que había pedido y es que fuéramos verticales; en la primera parte, desajustes en el tiro a palos y errores en los últimos metros nos han costado una victoria clara”.

El preparador entendió que “se ha perdonado una victoria clara, ya que se ha pasado al menos 25 minutos en zona de 22 contraria”. Jiménez consideró que “se ha tenido la superioridad territorial claramente y también de posesión y se ha empatado por no saber gestionar una vez más las situaciones de ensayo”. Los demás marcadores habían sido propicios para un gran salto, con el 74-0 de Liceo sobre Helvetia y con el 53-10 de CRC Pozuelo sobre Ingenieros Industriales Las Rozas, incluso con el 20-23 de Trocadero sobre Portuense.