Cuando el fútbol se vivía con enorme pasión

El fútbol fue la pasión de su vida porque recuerda que los pequeños de antes no tenían nada que hacer. Se divertían en aquella época jugando al fútbol, y descalzos, sin botas... era el fútbol en blanco y negro, el fútbol en estado puro. Se puso tres camisetas: la del Roquetas, Berja y Poli Ejido. Solo guarda bonitos recuerdos de su etapa en el mundo del balompié, donde hizo una legión de amigos, pero amigos de verdad que hoy sigue conservando. 

¿Cómo comenzó en el mundo del fútbol?

El fútbol es la pasión más grande de mi vida, siempre lo ha sido. Los pequeños de entonces no teníamos nada que hacer y nos divertíamos muchos jugando al fútbol, y lo hacíamos sin nada, sin botas, descalzos... casi como animales, pero nos gustaba tanto que así jugábamos antes. 

Estuvo en tres equipos en su carrera.

Realmente estuve en cuatro porque también jugué en el San Antonio, pero la verdad es que estuve muy poco tiempo y me vine al Berja. 

Sus inicios en el mundo del fútbol, como buen roquetero, fue en el equipo del Roquetas. 

Los recuerdos que tengo de mi etapa en el Roquetas son maravillosos, muy bonitos porque el compañerismo que había era enorme, gente muy sana que lo daba todo por la camiseta del Roquetas. Fue una satisfacción muy grande jugar en el Roquetas. Acaba de trabajar y uno iba a entrenar con un gran orgullo, con mucha ilusión. Había como una fantasía en el vestuario de que llegara el domingo para jugar al fútbol.

Esa ilusión de la que habla ya no se ve en el mundo del fútbol. 

La ilusión que había antes ya no existe, el fútbol de hoy en día ya no es el mismo, todo ha cambiado mucho. ¡Si yo volviera a ser aquel futbolista de esa épocas! La gente antes iba al campo a criticar y al mismo tiempo nos aplaudían, era muy bonito, una etapa preciosa de mi vida. Y todo eso era así porque se daba todo en el campo en todos y cada uno de los partidos. 

Dice que la afición criticaba y aplaudía. 

Así era la afición de antes en el fútbol. 

¿Qué recuerdos tiene de su etapa en el Berja?

Me hicieron una oferta porque en Roquetas de vez en cuando ganaba una prima de 1.000 pesetillas, pero muy de vez en cuando. Llegó el Berja y me ofreció 6.000 pesetas al mes en los años 73-74, que era dinero en aquela época. En el Berja solo estuve una temporada jugando. 

El Berja siempre ha tenido grandes futbolistas.

Había una plantilla espectacular con jugadores muy buenos, todos eran de Almería, excepto cuatro.  La plantilla estaba formada con los grandes de Almería, y en el Berja estaban los mejores. El Berja siempre tuvo grandes futbolistas a fuerza de talonario, de mucho dinero.  

Y del Berja al Polideportivo Ejido. 

Estuve solo un año en el Berja porque el entrenador y yo pues... (risas) que no; los dos éramos de carácter muy fuertes . En El Ejido estuve tres temporadas, donde viví tres campañas maravillosas en todos los sentidos.  Le ponía mucha garra y eso la afición lo agradecía. 

Si tuviera que quedarse con una etapa en su carera futbolística...

Donde nací, en mi época en el Roquetas porque fue donde comencé a tocar el balón en mi infancia, con mis amigos, descalzos, sin balones porque aquello no eran balones, eran de trapo, los hacíamos nosotros.

¿Hizo muchos amigos en el fútbol?

Gracias a Dios por donde voy siempre aparece un buen amigo de la época del fútbol; eso es muy bonito, precioso. Y siempre me dicen que bien está el roquetero. 

Si tuviera que definirse como futbolista....

Era un jugador que se anticipaba siempre, de hecho me gustaba mucho el tema de la anticipación. Ganar la acción al contrario es fundamental en el mundo del fútbol porque si uno no se anticipa se queda muerto en el campo. 

¿Cómo era los vestuarios , los campos...?

En el Roquetas había que llevarse la ropa porque eran los principios, pero luego por ejemplo en el Polideportivo Ejido era maravilloso todo, fantástico; teníamos de todo en aquella época y no teníamos que lleva para entrenar o jugar los partidos. 

¿Ganó dinero en el mundo del fútbol?

En el Polideportivo Ejido llegué a cobrar 10.000 pesetas mensuales y 75.000 pesetas de ficha. Era mucho dinero en los años 77-78.  

¿Qué significa Roquetas de Mar?

¡Lo más grande! Lo que pasa es que se ha puesto tan grande que a veces uno se siente como un desconocido, eso no me alegra mucho.