El Almería pone fin a la crisis a lo grande avasallando al Deportivo

El Almería goleó al Deportivo en el mejor partido del conjunto almeriense desde que José María Gutiérrez se hiciera cargo del equipo. Sólido en defensa, disciplinado, intenso y vertical, los rojiblancos recuperan la tercera plaza y se colocan a 6 puntos de Cádiz. En esta oportunidad José María Gutiérrez no hizo demasiadas variaciones, pero tampoco repitió once. Respecto al duelo del Carranza dos cambios, la entrada de Villalba por Aguza y la de Juan Muñoz por Appiah. El dibujo del 4-4-2 que en los encuentros precedentes había dejado dudas. Fernando Vázquez se presentó con una formación más compacta con cinco defensas, de ellos dos laterales de largo recorrido tres medios centros y dos atacantes, Colak y Merino. La afición disfrutó en el Mediterráneo.

Tras unos primeros compases de tanteo llega el primer contratiempo para los gallegos con al lesión de su lateral diestro Bóveda. Casi sin solución de continuidad comienza el festival atacante del costado derecho rojiblanco con un servicio de Balliu sobre Darwin Núñez. control orientado del charrúa, le  gana la posición al defensor y bate sin remisión  Giménez. Después de tanta penuria acumulada estallan las casi diez mil almas rojiblancas al ver a su equipo por delante en el electrónico.

Balliu se estrena Pero al lateral catalán y Corpas les tocó también sufrir en defensa para intentar parar a Mollejo, el mejor de los visitantes y que en el minuto 11 obligó a intervenir a Fernando para cortar un centro que llevaba veneno. Pese a que los visitantes superaban a los locales en posesión los de Gutiérrez con dos lineas de cuatro muy juntas y un trabajo sobresaliente en la recuperación de César y Vada, hicieron que pasaran los minutos sin que el meta local fuese seriamente inquietado.
Cerca de la media hora pared entre Corpas y Balliu, con desmarque hacia el centro de éste, controla superando la marca del defensor y bate con talento a un Giménez vendido. Hasta el final del primer periodo el Almería da sensación de seguridad y le faltó precisión para matar el partido a la contra.

No tardó demasiado el Almería, que salió arrollando tras el descanso, en poner fin a la resistencia deportivista ya que en el minuto 52 Corpas enviaba al palo y el rechace lo transformaba Juan Muñoz. Gutiérrez agotó los tres cambios, el equipo controló el partido, con algunas lagunas provocadas por Koné y a punto de llegar al noventa Darwin hacia los honores a una gran jugada de Corpas.  Una victoria que libera al Almería de la ansiedad y le devuelve al buen camino.