Italia es campeona de Europa

Italia se ha proclamado campeona de Europa 58 años después tras vencer a Inglaterra en el estadio de Wembley en los penaltis gracias a un heroico Donnarumma, quien se convirtió en el gran héroe del país azzurro al erigirse como el jugador decisivo de la final.

El resumen del partido

Los primeros minutos se decantaron totalmente a favor de la selección inglesa. La energía que irradiaba Wembley los aupó rápidamente hasta el área de Donnarumma en los primeros instantes de partido. Un espectacular centro de Kieran Trippier desde la derecha cayó del cielo para que a bote pronto, un renacido Luke Shaw empalase el disparo y lo conectase directamente a la red, desequilibrando el marcador con el 1-0.

Italia intentó reaccionar, sin embargo, la zaga inglesa se mantuvo férrea sin conceder ninguna opción a unos Insigne y Chiesa, que no veían espacios para explotarlos como a ellos les gusta. El partido llegó al descanso con control inglés y con un plan de partido que continuaría hasta el final de choque, tal y como había tramado Gareth Southgate antes del partido.

Grandes personalidades en el choque como David Beckham, Tom Cruise o hasta el mismo príncipe Guillermo, representando a la Casa Real Británica. Todos ellos vieron cómo Italia se contrapuso a todas las dificultades y remontó un encuentro que parecía perdido en muchos tramos.

Pickford se erigía como uno de los grandes candidatos para el MVP de la final en los segundo 45 minutos con dos grandes paradas que se antojaban decisivas, sin embargo Bonucci aprovechó un rechace, tras un córner, antes del minuto 70, para poner el empate en el marcador con el 1-1. Resultado con el que llegarían a la prórroga del partido, bajo el dominio azzurro.

La prórroga

El tiempo extra se repartió entre dos claras ocasiones para ambas selecciones. Por un lado, Berardi, que no supo aprovechar un pase largo de Bonucci frente a frente con Donnarumma para desequilibrar un partido, que estaba bajo la tutela de los de Mancini. En la segunda parte de la prórroga fue una miedosa Inglaterra la que en la cabeza de John Stones, a pase de Harry Kane, hizo que los seguidores ingleses se llevasen las manos a la cabeza.

La polémica del partido llegó en el minuto 114 con una posible roja a Jorginho por una dura entrada sobre Jack Grealish.