Berenguel coloca y remata

Un entrenador con las ideas claras. No se lleven el reloj ni estén pendientes del tiempo si quedan con Manolo Berenguel para hablar, sobre todo si es de voleibol. De verbo fácil y con una exquisita educación. Así es el entrenador del Unicaja Costa de Almería, un tipo encantador, que no da rodeos en ninguna de las preguntas durante la charla con LA VOZ y Cadena SER en la pista del Pabellón Moisés Ruiz, aunque recuerda que “estamos en la casa de Moisés Ruiz”. Apunta, con sinceridad, que no sabría hacer otra cosa que no fuera voleibol; es su vida, su pasión, su profesión...

“La palabra voleibol significa mi vida entera, mi vida completa, lo es absolutamente todo. Tuve una conversación con cierta persona y le comenté que el voleibol incluso lo pongo a la altura de mi familia, aunque eso no es real, claro, pero con eso creo que ya esto dicho ¿no?. El voleibol es todo en mi vida desde la época de Moisés Ruiz. La mayoría de mis íntimos amigos de toda la vida tienen que ver con el voleibol”, comenta.

Profesionalidad
La ilusión del primer día “nunca se pierde, aunque es cierto que tenemos unos días mejores que otros. Siempre me he considero un deportista muy competitivo desde que Moisés nos metió el voleibol por las venas no he parado”, aunque recuerda que “tuve mi época en la que estuve cerca de dejar el voleibol cuando me retiré, pero tuve claro que no podía vivir sin voleibol. He tenido la inmensa suerte de poder dedicarme a esto y estar en mi casa haciendo lo que más me gusta. Me siento un total privilegiado en el Unicaja Costa de Almería, no puedo tener otro trabajo mejor, de verdad”, explica el míster de un club campeón con una plantilla perfecta esta temporada en la Superliga.

Le cambia la cara cuando habla de la plantilla, de la que se siente muy orgulloso porque se ha creado un ambiente espectacular en el vestuario del Unicaja Costa de Almería: “Hay muy buenas personas y grandes jugadores en el grupo; hay gente con peso dentro del vestuario, son profesionales como la copa de un pino, pero diría que hay en el club en general hay grandes personas, y eso no es fácil. Estoy encantado con todos, con el cuerpo técnico, el ambiente es espectacular a nivel deportivo y humano”.

Vestuario
¡Qué difícil es diseñar una plantilla con grandes personas! “Muy complicado, por eso digo que el factor suerte es muy importante en el mundo del deporte. Los que han venido de fuera son espectaculares, van solos, no tengo nada malo que decir de los jugadores que tengo”, afirma.

De hecho, Manolo Berenguel abre su corazón y afirma a LA VOZ y Cadena SER que “esta época me recuerda a la de Cosme Prenafeta, Carlos Carreño, Juanjo Salvador... teníamos el núcleo hecho y todos se sumaban al grupo, se subían al carro. Y todo eso se está reflejando en la grada con ese ambiente que estamos transmitiendo todos los días, en los partidos... Todo suma y estamos creciendo en la grada. Ojalá volvamos a retomar el ciclo, porque esto al final es cíclico”, señala. Pide que “nos respeten las lesiones, y en el tema del Covid estamos tomando todas las medidas, como es normal. Tengo una plantilla muy responsable en ese sentido”, comenta.

Es directo y habla de las posibilidades de ganar la Superliga: “Se ve como más cercana por la trayectoria que vamos teniendo, pero hay muchos equipos que aún tienen que decir muchas cosas. Estamos en el bueno camino, pero paso a paso, queda mucho. Hemos dado un par de golpes en la mesa y tenemos capacidad de crecimiento”, explica.

La afición

“Cuando era jugador y hacía una acción buena el público vibraba; me gustaría transmitir por un momento lo que nosotros sentimos”, dice el entrenador del Unicaja Costa de Almería, un Manolo Berenguel que se siente como el entrenador más feliz del mundo trabajando en su tierra, en la casa de Moisés Ruiz, como él comenta.

El míster de Unicaja Costa de Almería coloca y remata al mismo tiempo en la entrevista durante casi 25 minutos. No tiene prisa por acabar, se le ve cómodo y contento atendiendo a LA VOZ y Cadena SER en la pista del Pabellón Moisés Ruiz después del entrenamiento. Habla de voleibol, de mucho voleibol, pero desvela detalles personales, muchos de ellos curiosos. Se podría decir que Manolo Berenguel es un genio en el plano corto, da juego y gusta charlar con él. “Intento desconectar, pero lo llevo muy mal. Siempre tengo las imágenes de los partidos metidas en la cabeza”, dice un técnico encantado con su hijo y su hija: “El mayor presume de papá por ahí; no sé si jugará al voleibol. Han estado en el Campus de Cosme, hacen mucho deporte, eso es bueno”.

¡Has nombrado a Cosme!: “Uno de mis mejores amigos en la vida gracias al voleibol, como Carlos Carreño y Juanjo Salvador”. Vamos con la música, ¿qué escucha? De todo un poco, me gusta todo, mis gustos son cíclicos”. Y las redes sociales, ¿qué? No me entusiasman, pero es una herramienta importante”, dice un Manolo Berenguel que desvela que “me tatuaría el escudo del Unicaja, pero no lo hago por el que qué dirán; este club lo es todo en mi vida. No regalo la ropa de Unicaja Costa de Almería a cualquiera cuando llega el final de temporada”, desvela el Maestro del voleibol.