De vuelta a La Manga

c.m.
Redacción
 
El Almería no podía faltar a su cita con La Manga y los aficionados que quieran asistir mañana al amistoso frente al Villarreal no tendrán que pasar por taquilla. El pasado domingo, en Pinatar Arena, la entrada valía cinco euros. Las instalaciones en las que se disputó el partido contra el Valladolid y donde durante la semana va a estar trabajando el conjunto de Francisco, son espectaculares. Sus campos de fútbol están en buenas condiciones, incluso con dos gradas en los laterales, hay gimnasio, piscina y muchas pistas de pádel.

Rival El inicio de la temporada se acerca y Francisco preparó un calendario de amistosos corto, pero intenso. Esta semana comienza con sesiones de entrenamiento en Pinatar y acabará con dos amistosos en 24 horas. El primero es mañana, a las siete de la tarde, en las instalaciones de La Manga Club. Allí los rojiblancos se midieron el año pasado a Levante y Real Murcia. Ambos enfrentamientos acabaron con victoria.
El Villarreal, que como casi todos los equipos de Primera, ha dispuesto de más tiempo para prepararse, volverá a medir al Almería. Frente al Real Valladolid mostró dos caras: la primera fue muy mejorable y la segunda con más carácter e intensidad, tanto que varios jugadores vieron cartulina amarilla.

Cómo viajar La Peña Milhojas fleta un autocar para ir a La Manga. La salida será mañana a las 15.30 horas desde la explanada del Juan Rojas, aunque se podría retrasar diez minutos más si algún viajero lo solicita por motivos laborales. El precio oscila entre los 8 y 13 euros dependiendo de las personas que vayan. El objetivo es cubrir 30 plazas. Si te quieres apuntar, llama al 647 30 59 40 (Mónica) y disfruta en directo del tercer amistoso de pretemporada.
Teniendo en cuenta que la distancia entre Almería y La Manga es de algo más de dos horas, debido en gran medida al tráfico de la zona, hará que muchos se animen a coger el coche y ver al equipo. No se paga entrada, pero aún no se sabe en qué campo se disputará el amistoso.
El año pasado contra el Levante había una grada muy pequeña y ante el Real Murcia sí se jugó en el campo donde la comodidad era mayor para futbolistas y afición.