Siempre he tenido a Francisco como a un tipo especial. Desde que debutó con Luisillo a los 17 años en Tercera División dejó claro que tenía desparpajo en este mundo. Han hablado maravillas de él sus entrenadores y me decía Martín Doblado que en las clases de entrenador era una esponjica.
Francisco sabe lo que lleva entre manos y su carrera está dentro y fuera del campo. En el día a día poniendo a punto a sus muchachos y fuera del trabajo consiguiendo la mejor información y a todos los niveles. Un tipo listo, muy listo es Francisco.
Yo se que no desconecta nunca del fútbol. Es como el médico que vive las 24 horas del día de guardia y a Francisco lo que sea información siempre le interesa. Alfonso se la da a diario y está al tanto de todo lo que se está firmando para el equipo.
Francisco se va a Ibiza con el móvil operativo y compra la prensa deportiva y escucha la radio y recibe mensajes. Hoy con los adelantos que hay no estar informado es un pecado que no se permite el entrenador del Almería.
Y una cosa buena que tiene el entrenador del Almería es el control del entorno del que a veces se encarga él y otras veces gente de su confianza. Esto no es malo señores, un buen entorno gana partidos y suma. Francisco es de los que siempre busca lo mejor para el Almería.
Es verdad que está de vacaciones en Formentera pero da igual. No pierde el contacto con el Almería ni en las Islas Candongas. Me gusta este entrenador moderno que cada día sube un nuevo escalón y todo en beneficio del club que le paga. No desconectes nunca nunca.
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