La plantilla de Unicaja lleva la ilusión al Hospital Torrecárdenas

La Superliga Masculina de Voleibol volverá a subir el telón el próximo sábado día 10 de enero de 2015 tras las fiestas de Navidad y Año Nuevo, cuando Unicaja Almería reciba en el Pabellón Moisés Ruiz a un correoso rival como es UBE L’Illa Grau al que intentará volverle a ganar para seguir en lo más alto de la clasificación general e imbatidos en lo que va de curso, por lo que entrena desde el pasado lunes para ir poco a poco retomando el ritmo de trabajo tras las pequeñas vacaciones que su entrenador, Piero Molducci, les concedió tras vencer por 3-1 a Cajasol Juvasa en la última jornada de la primera vuelta liguera. Pero si pensar en el que será su próximo rival es obligado, pensar en los niños también lo es y más en estas fechas tan señaladas donde en menos de una semana recibirán la visita de los Reyes Magos, y es por lo que en estos días son muchas organizaciones y personas particulares las que ‘luchan’ para sacar de los más pequeños una sonrisa. El equipo blanquiverde no ha querido ser menos y se ha tomado un descanso en sus entrenamientos así como que han dejado de ser deportistas profesionales por unas horas para convertirse en todo unos profesionales de la felicidad, por lo que se desplazaron al Hospital Torrecárdenas de Almería para repartir regalos, como ya ha hecho en otros años, a los niños que se encuentran ingresados en el centro y no van a pasar estas fechas tan señaladas en su hogar.

Toda la plantilla ahorradora con su capitán, Jorge Almansa, a la cabeza, más el cuerpo técnico en el que faltó su entrenador Piero Molducci que volvía de Italia por las vacaciones, visitaron alrededor de 20 habitaciones del área de Pediatría en la que se encuentran alojados los más de 22 niños con edades que oscilan desde los dos meses hasta los quince años para darle una bolsa cargada de regalos donde se podían ver entre otras cosas camisetas de juego, peluches, juguetes, diversos juegos o algunos dulces. Desde el centro, todo ha sido colaboración y apoyo para unas fechas, como bien han apuntado desde el cuerpo hospitalario, que “son especiales y sobre todo para los niños que se convierten en los protagonistas de la casa, por lo que estar aquí y que vengan a visitarlos, y más si se trata de los jugadores de un equipo que juega al máximo nivel y que ha conseguido tantos éxitos es algo maravilloso”, además de que estas Navidades han llegado mejor que otros años y se encuentran en el Hospital menos pequeños que de costumbre. Además, muchos de los niños solicitaron después la firma de los jugadores en sus camisetas y algunas fotografías para inmortalizar este ‘mágico’ momento, a los que también se sumaron algunos miembros del personal de Torrecárdenas que no quisieron desperdiciar la ocasión de obtener una instantánea de los actuales líderes y campeones de invierno de la Superliga.

Los jugadores, por su parte, también disfrutaron del momento y se olvidaron durante una hora de la cita que tendrán en apenas diez días ante UBE L’Illa Grau que será el primer choque de la segunda vuelta de la competición local que se disputará en el Pabellón Moisés Ruiz y que también será el primero que disputen tras las fiestas navideñas y Año Nuevo. Además, saben que a partir de ahora comienza la ‘hora de la verdad’, donde tendrán que empezar a definir su posición de cara a los play off por el título de Superliga y en el horizonte ya se encuentra la Copa del Rey que en poco más de un mes, del 6 al 8 de febrero de 2015, se celebrará en Teruel y donde los ahorradores buscarán revalidar el título que consiguieron este año en Guadalajara que significaría el décimo en un año especial al cumplirse el 25 aniversario de su presencia en la Superliga.

Pero todo eso vendrá en las próximas semanas, por lo que se olvidaron de ello durante la hora en la que sacaron una gran sonrisa a los niños ingresados en el complejo hospitalario de la capital así como a sus padres y familiares que se encontraban con ellos y demostraron una vez más que los equipos campeones no solo se demuestran en la pista de juego sino que empiezan a hacerlo desde el corazón y con detalles de índole humano.