Decenas de personas de distintos puntos de la provincia de Almería han asistido en el varadero de Almería capital a la jornada ‘Retos en materia de agua en la provincia de Almería’, organizada por Izquierda Unida y que ha contado con la participación de representantes de diferentes colectivos y entidades de diversas partes de la provincia, como la UAL, ACUAMED, Diputación, Instituto Geológico y Minero, delegación de Medio Ambiente, plataformas y asociaciones en defensa del agua, aguas del Bajo Andarax, Poniente, Almanzora, etc.
“De esta jornada han de salir sino conclusiones puntos de partida para poder intentar resolver el mayor problema que tiene la provincia de Almería: la escasez de agua, una jornada que pretende responder con la crudeza y el realismo que sea necesario a las necesidades reales en materia de agua de esta provincia sobre la base de si hay o no hay recursos hídricos suficientes para garantizar el futuro económico, social y medioambiental de nuestra provincia”, tal y como destacó la coordinadora provincial, Rosalía Martín, encargada de abrir esta jornada, con un saludo a ponentes y participantes y un recordatorio se la situación de escasez de agua en la provincia, a la vez que destacó que en una provincia donde apenas llueve y hay pocos caudales y escasa agua en los ríos “nuestro potencial está en las aguas subterráneas, en los acuíferos, algo fundamental a tener en cuenta. Debemos ser conscientes de nuestros recursos y nuestro entorno”.
Martín recordó cómo los acuíferos “están sobreexplotados. Somos una provincia con muchas posibilidades desde el punto de vista económico pero que tenemos escasos recursos hídricos, lo que ha dado lugar a un gran desarrollo especialmente en el sector agrícola que hace que este sector consuma en torno al 80 90% de los recursos disponibles de agua, y en menor medida el sector turístico. Todo ello ha dado lugar a la sobre explotación de los acuíferos que a día de hoy están amenazados, se están agotando y poniendo en peligro nuestro futuro”.
La coordinadora de IU recordó cómo se han ido buscando alternativas, con pantanetas, pantanos, un trasvase, desaladoras, sistemas de riego moderno, etc., pero no es suficiente. La depuración se ha usado para crear nuevas demandas, en teoría todos los grandes núcleos urbanos deberían estar depurando su agua y solo lo hace Almería capital. Y se decía que los campos de golf iban a ser regados a través del agua residual a través de las urbanizaciones donde estaban ubicados, pero la realidad es que tenemos un sector turístico estacional y eso no es posible y se echa mano a los pozos. Las depuradoras no funcionan al cien por cien y el agua se acaba perdiendo y llega al mar muchas veces hasta sin depurar. Se refirió asimismo a los planes que se han traído a la provincia para solucionar el tema del agua, “planes que han traído mucha obra y poca agua. Mucho cemento, mucha inversión pero elaborados desde criterios desarrollistas que dejan de lado los aspectos medioambientales y sociales y no se han planteado como una política de gestión del agua sino que son más bien planes de obras públicas que han beneficiado a las grandes constructoras”.
Martín habló de las desaladoras y de cómo se encarece el agua, por lo que lanzó la pregunta de si “seremos capaces los usuarios de poder asumir los precios. Pero aunque así sea, los acuíferos se seguirán sobre explotando, lo que genera un déficit. Si esto no se soluciona los acuíferos se acabarán agotando o salinizando, y a nuestro juicio solo hay dos salidas: bien se disminuyen los consumos o bien buscamos nuevos recursos, y a ese reto no enfrentamos en el día de hoy: o nos decidimos por optimizar toda la infraestructura y aportaciones existentes y disminuimos los consumos o al menos los planificamos en función de los recursos hídricos que ello pueda producirnos a su usos probables o por el contrario continuamos buscando más recursos, por lo tanto más aportaciones de dentro y de fuera de los límites geográficos, lo que va a conllevar evidentemente más inversiones y más costes en materia de infraestructuras, va a conllevar la no planificación de los recursos ni la planificación de sus usos ya que iremos a demanda y ésta cada vez será mayor, cada vez será necesaria más agua, situándonos una espiral de continuo déficit. Si nos decidimos por dar respuesta a la demanda tenemos que saber que quien se va a beneficiar serán los grandes empresarios. Pero hay que tener en cuenta que mientras que en más de 19 municipios de Almería el agua del grifo no es apta para su consumo, no es potable, según la propia Consejería de Salud, otros municipios se plantean plantar miles de olivos en pleno desierto, o desmontar cerros para continuar haciendo grandes extensiones de invernaderos. La guerra del control del agua ya ha comenzado, estamos hablando de una cuestión de poder. Los que controlan el agua lo controlan todo: el futuro económico, social y medioambiental de nuestra provincia. Así nos encontramos con que el control del agua que debería ser público a través de la comisaría de agua y las Confederaciones Hidrográficas sabemos que no es así y que los organismos de cuenca que se han caracterizado por la dejación de funciones en la mayoría de los casos y también sabemos que ha existido manga ancha en el otorgamiento de concesiones y perforaciones difícilmente justificables. Las grandes empresas o los grandes propietarios son los que tienen más fácil justificar costosos proyecto para conseguir el agua en esta provincia, bien sea trayéndolas de otras zonas o a través de las desaladoras.
“Y es que cuando el agua, que es un bien público, se concesiona para el uso privado y por la vía de los hechos lo convertimos en una mercantilización, quién tiene el poder del agua tiene nuestro futuro en sus manos. Necesitamos por tanto dar respuesta colectiva para afrontar el gran reto de la provincia de Almería desde la sostenibilidad, desde de interés general, porque de no ser así otros nos convencerán y convencerán a la gente de la provincia de Almería de que sus problemas son nuestros problemas y nos tiraremos a las calles para defender esos intereses”.
Por eso IU decidió hacer esta jornada, “para que desde un debate sereno tranquilo, riguroso sobre cómo reducir la sobre explotación de los acuíferos, o cómo aumentar el consumo del agua desalada o como garantizar el abastecimiento de calidad o cómo avanzar hacia una nueva cultura del agua, en definitiva una jornada capaz de plantear alternativas colectivas en cuanto a la gestión del agua, en cuanto a su uso y en cuanto a su gobernanza”
Bajo la pregunta ¿hay recursos hídricos y alternativas para garantizar el futuro económico, social y medioambiental de nuestra provincia? IU ha celebrado un debate a través de diversas ponencias y mesas redondas de participación y diálogo.
El primer debate versó sobre ‘Análisis y alternativas hídricas para la provincia de Almería’, con las intervenciones de: Abel La Calle, profesor de Derecho Ambiental en la Universidad de Almería y presidente de la Fundación nueva cultura del agua; Susana López Velasco, gerente territorial Almería Acuamed; F. Javier Martínez, técnico del ciclo del agua urbano. Diputación de Almería; Patricia Domínguez, jefa unidad de Almería Instituto Geológico y Minero de España; Francisco José Fuentes Cabezas, jefe de servicio de dominio público hidráulico y calidad de aguas, Delegación Provincial de Medio Ambiente; y José María Calahorra director del grupo inv. Recursos hídricos y geología ambiental Universidad de Almería. Moderó Javier M. de la Horra, periodista de La Voz de Almería.
Tras una pausa se trataron 'Reivindicaciones y propuestas de la Mesa del agua’, con las intervenciones de José Antonio Fernández, presidente de FERAL; Manuel García Quero, Junta Central de usuarios del Poniente; Antonio López Úbeda, CUNC Níjar; José Antonio Pérez Sánchez, CGUAL Bajo Andarax; Matías Gómez Cervellera, Aguas de Almanzora. Moderó este debate Encarna Moreno, concejala Izquierda Unida Roquetas.
Y la últimas de las mesas de debate fue sobre la ‘Red de plataformas por el agua en la provincia de Almería’, con las intervenciones de Pascual Soriano, Plataforma en Defensa del agua en los Vélez; Juan Bartolomé Escobar, Asociación Cañada Las Norias; Julio Olea, Plataforma en Defensa del agua en Berja; y José Luis López, Plataforma en Defensa del río Aguas. Moderó el debate María Jesús Amate, diputada provincial de Izquierda Unida.
Para finalizar la jornada, Rodrigo González, responsable provincial de Organización de Izquierda Unida en Almería, agradeció la participación y asistencia y realizó un resumen y balance.
“Salimos de aquí con la constancia de que el agua es un problema en esta provincia y que todos debemos unirnos para solucionarlo. Hemos visto que las posibles medidas pueden ser el aumento de las desaladoras, pluviales y la reutilización de agua, aunque eso no puede impedirnos cuestionar el modelo económico y su futuro”, matizó González, quien espera que se sigan celebrando foros de este tipo, porque nosotros nos vamos a volcar en buscar las soluciones para una sostenibilidad del agua en nuestra provincia, tanto económica como medio ambientalmente.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/69/seragricultura/117661/la-guerra-del-control-del-agua-ya-ha-comenzado-quienes-controlan-el-agua-lo-controlan-todo
Temas relacionados
-
Universidad de Almería
-
Golf
-
Infraestructuras
-
Consumo
-
Invernaderos
-
Empresas
-
Cultura
-
Política
-
Berja
-
Asociaciones
-
Medio Ambiente
-
Diputación de Almería
-
Salud