Caracola es nombre femenino

Con motivo de la celebración del Día Internacional de la Mujer, la Federación de Enseñanza de CCOO se ha puesto a buscar algo que aportar al evento y ha elaborado un documento-denuncia que lamenta que sólo 28 centros educativos de la provincia  tengan nombre de mujer. El análisis se fija en colegios que han sido denominados con nombres de mujeres relevantes para las letras, la ciencia, la educación y la política, excluyendo –faltaría más- a las advocaciones religiosas de vírgenes y santas, salvo excepciones como Santa Teresa de Jesús, en la que sí han visto los sindicalistas algo de mérito.
“La verdad padece pero no perece,” nos advertía la santa escritora, y es verdad que CCOO suele tener ojo clínico para algunas cosas y un parche pirata para otras. Con independencia del nombre que la Junta de Andalucía haya puesto a los colegios almerienses, estoy seguro de que en la Federación de Enseñanza de ese sindicato hay muchas afiliadas que todos los días han de dar clase en caracolas o aulas prefabricadas, por no entrar ya en las condiciones laborales, en las listas de espera o en las pruebas de acceso. He ahí un factor muy interesante para la denuncia feminista, que bien podría haber enriquecido la aportación sindical a los actos y homenajes del famoso 8 de Marzo. Pero hay cosas que cuando no se quieren ver, no hay modo de esclarecerlas. Así que no estará de más recordar a Comisiones Obreras que la provincia de Almería es la que más aulas prefabricadas tiene de toda Andalucía. ¡En algo teníamos que ser los primeros! En concreto, tenemos 78 barracones (ocho más que hace unos años) en donde a diario se educan niños almerienses, en muchos casos bajo la supervisión de maestras afiliadas a Comisiones Obreras, que también pasan frío en invierno y calor en primavera. Y como seguro que esto tampoco quieren verlo el año que viene, les sugiero que vayan preparando denuncias para corregir el intolerable machismo del término “caracola” en lugar de “caracolo”