¿Y qué harían con el Pendón?

Un año más, el Día del Pendón se celebró en Almería sin la presencia de los concejales de IU y con la ausencia de los del PSOE en la parte religiosa de los actos que recuerdan, de manera simbólica, el modo en el los tres estamentos, -civil, militar y religioso- propiciaron en el S.XV el final de la dominación musulmana y la creación del Cabildo y de la Almería moderna. No diré yo que el protocolo del acto no pueda revisarse o adaptarse, pero lo que sí digo es que mientras la cosa esté así, así habría que asumirlo, porque no se puede dejar de ser concejal, precisamente, en el acto institucional más solemne de cada año. A lo mejor estoy equivocado, pero creo que a las instituciones democráticas les iría mucho mejor si todos los cargos electos considerasen que ocupan un escaño, retribuido por todos, en el que representan a todos los ciudadanos y no sólo a los votantes de su partido. Por desgracia, el sentido de lo institucional es, a menudo, tan infrecuente o desusado como el sentido común, que goza de su justo predicamento porque pertenece a todas las personas y en todas ellas se manifiesta, o al menos así debería ser. Insisto en la posibilidad del error, pero creo que el Ayuntamiento está siempre por encima de la orientación política de los concejales y de las personalísimas interpretaciones que puedan hacer de los actos en los que está establecido que participe toda la Corporación Municipal. Curiosamente, los que defienden las ausencias y las salidas son los mismos que se pusieron como panteras cuando hace unos cuantos años el entonces alcalde popular, Juan Megino, decidió suprimir La Marsellesa del protocolo del Día de Los Coloraos. En todo caso, esta cuestión plantea una duda que aún no ha sido resuelta por los ausentes o disconformes: ¿qué pasaría con el Día del Pendón en caso de que PSOE o IU volvieran a ser Equipo de Gobierno? Responder a esa pregunta daría carta de naturaleza política a lo que, hasta ahora, no pasa de ser un ejercicio de inmadura gestualidad.