Con la muerte de Paco Sierra no sólo se pierde al hombre, al amigo y a su inabarcable constelación de afectos y admiraciones, sino que también se marcha una forma de entender y extender la hostelería en Almería. El factor humano, tan desgarrador en cualquier obituario, cobra especial sentido hoy en la ausencia de Paco, un profesional que supo levantar su trayectoria desde la dimensión singular del respeto por lo que se hacía y para quién se hacía. Valores y prácticas que él y su familia han sabido mantener en una empresa que es, a día de hoy, un referente de la hostelería en toda España. Y eso es lo que hay que reconocer en un día como hoy, en el que es justo dar testimonio de agradecimiento y admiración por quien supo unir su marca y su firma al nombre de la ciudad en la que realizaba su trabajo. Porque lo cierto es que decir Club de Mar es decir Almería desde hace ya tres generaciones. Es difícil encontrar a un almeriense vivo que, en alguna ocasión, no haya pasado por esa Casa, tanto en la primera como en la actual ubicación, para disfrutar del trabajo de un equipo de profesionales que en su día fueron capaces de trascender las fronteras habituales del negocio para consolidarse en la dimensión de lo institucional. Y es que el Club de Mar es, para Almería, mucho más que un excelente restaurante. Entre sus paredes se han cerrado más negocios, se han apalabrado más contratos y se han celebrado y descelebrado más matrimonios que en ningún otro lugar de Almería. Y eso ha unido a esa Casa a la genealogía del cariño de incontables familias de Almería. Algo que no habría sido posible si Paco Sierra y su equipo no hubieran sabido convertir las salas del club en un espacio de encuentro y servicio de primer nivel, frente al mar que da sentido a su denominación y a su origen. Se nos va a hacer extraño no volver a verle, junto a la barra, cada vez que volvamos a entrar o salir de la que para siempre será, además de su Casa, una escuela de señorío. Descanse en paz.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/9/opinion/127561/casa-club-y-escuela