El Espigón del Gato, nuevo BIC

La Diputación acaba de presentar una ambiciosa campaña de promoción de Almería como destino turístico en el mercado alemán, que va a doblar el número de ciudades alemanas con las que estará conectada nuestra capital hasta el próximo mes de noviembre. Por medio de un convenio firmado con Hoteles Playa, se va a conseguir que en los próximos seis meses visiten Almería 9.000 turistas alemanes, lo cual supone una más que notable inyección al flujo económico que aporta el turismo a las empresas almerienses. Pero la Diputación no es la única en esforzarse por atraer a más turistas. Por ejemplo, el Grupo Municipal Socialista acaba de presentar una iniciativa que pretende potenciar el turismo en Almería gracias al atractivo de los gatos callejeros. En serio que sí. Admito que, hasta ahora, sólo había tenido noticias del potencial turístico del minino callejero a través de la obra romana de Rafael Alberti, que escribía arrullado por los maullidos y efluvios cotidianos de la tribu de gatos que alimentaba a diario desde su cocina arrojándoles desperdicios. Los gatos y los poemas sobre las meadas callejeras en Roma perfuman la obra del poeta gaditano de un espeso aroma de progresismo felino, que es el que quieren trasladar los socialistas a Almería. La promotora del proyecto, la concejal socialista Inés Plaza (la misma que afirmó que llamar “hijos de su madre” a los vándalos era machismo) dice que el Ayuntamiento debería invertir en capturar, esterilizar y volver a soltar a los gatos callejeros porque comen ratones y porque son un elemento de atracción turística. Así quieren gestionar las cosas. En este sentido, me atrevo a sugerir al PSOE que inste a la Junta de Andalucía a calificar el Espigón del Gato, en el Zapillo, como Bien de Interés Cultual, para poder llevar allí a esos nueve mil alemanes, que seguramente volverán a sus casas entusiasmados por el espectáculo inolvidable de ver a unos cuantos gatos entre las rocas, lamiendo raspas. “Wunderbar, Frau Plaza, Vielen Dank”, murmurarán admirados.