Hace unos meses doña Carmen Ortiz, hoy fuera de la consejería, hablaba de nuevas ideas para el campo, cosa que nos parece positivo que se haga, así como de dotarlo de una modernización siempre necesaria. Es de imaginar que el nuevo consejero asumirá esas nuevas ideas y que no se está hablando expresamente del sector invernadero, ya que éste está en permanente evolución. Se debe referir la consejería al resto de esas tierras que en el interior de nuestra provincia no tienen un eficiente desarrollo económico. Estoy totalmente de acuerdo en que hay que buscar nuevas ideas y modernizar el sector, falta le hace. El problema de estas historias son los ejemplos que nos han dejado las distintas políticas empleadas y que no han podido ser peores. Se levantaron las parras de todo el Andarax, se les dio un dinero a los parraleros y se les dejó a los hombres a la buena de dios. No se les dieron alternativas a plantar y llenas de salaos y abandonadas están las paratas. Como abandonados se van quedando sus pueblos. Sería bueno que la consejería explicara esas nuevas ideas a poner en marcha y esa modernidad a integrar en nuestros campos. Este año, por si no la sabe, más de la mitad de las naranjas del Andarax se han quedado en los árboles. ¡El precio, siempre el puñetero precio! Vamos con las nuevas ideas. Vamos con la modernidad. Pero vamos ya. A ustedes se les llena la boca de bonitas palabras, de grandes ideas a poner en práctica, pero la realidad no la ven nuestros pueblos. Y es que esa realidad tropieza con unas leyes salidas desde la lejana Sevilla en la que se estrellan los talentos. La mayoría de las tierras de nuestros pueblos están protegidas, a veces no se sabe muy bien por qué y de qué, pero ahí están, y ni siquiera ustedes, con sus buenas intenciones son capaces de superar. La Junta se ha convertido en un régimen tan controlador, que levantar una piedra, sulfatar una parra o quitar una hierba se ha convertido en un problema para nuestro campo. Antes de traernos todas las novedosas ideas que nos prepara y esa modernidad de la que hablan, acaben con tanta incongruencia como tienen que soportar los agricultores que no pueden criar bajo plástico. Mi vecino José tuvo las mandarinas en los árboles, anda pensando en quitarlas, ¿El problema? Que no sabe qué plantar. ¿Qué le decimos?
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/9/opinion/136025/nuevas-ideas-y-modernidad-para-el-campo-almeriense-del-interior