A la Junta no le gusta el Toblerone

¿De verdad a los señores de la Junta no les gusta el Toblerone, o hay algún otro interés detrás de la decisión? La Junta no va a tramitar, ni siquiera estudiar oficialmente, que pueda ser declarado Bic el singular almacén de la capital. Si nos damos una vuelta por los lugares y edificios que la comisión de “divinos” ha elevado a estudio, y al final confirmados como Lic o Bic, no entendemos que no les interese mantener el silo. Bastante más singular y significativo que muchos de los que han protegido. Si pienso mal, y casi siempre se acierta, creo que a la Junta, a la delegación y a los “divinos” se les está presionando. ¿Cómo? Han aparecido declaraciones que apuntan a lo que habría que pagar a los propietarios. Me río a carcajadas. ¿Qué le están pagando a los dueños del Cortijo del Fraile? Enciman les obligan a mantenerlo. Señoría, ¿es delito preguntar? Pues pregunto: ¿No será cuestión de los propietarios del Toblerone y sus influencias en la sociedad política y civil almeriense? Me van a decir que no es un elemento como para proteger, que es una pantalla ante nuestro mar y nuestro cielo. Puede ser cierto. Pero si acaban con él, ¿qué van a construir? Unos cuanto edificios, no creo que sean más singulares que el Toblerone, con mayor altura, seguro, y con el sello de la construcción de Almería, que no es un dechado por cierto. Que no se me enfaden los arquitectos. Ellos proyectan y planifican, pero el promotor que pone el dinero hace y deshace según los costos. Para una Almería abierta al sol, a la luz, al mar y al cielo sería peor el remedio que la enfermedad. Pero la Junta prefiere los edificios apuntando al cielo. ¿Por qué?