Vamos a tener que ligar la cola del paro que da dos vueltas a la placeta con la procesión religiosa que viene por la calle colateral y pedirle al Señor que nos digan la verdad, porque esto es un sin vivir. Un día nos dicen que lo peor de la crisis ha pasado ya, que hemos hecho los deberes y que ya no hay nada que temer.
Otro día sube la prima de riesgo, el Banco de España anuncia que este año llegaremos a un 27 por ciento de paro y que las previsiones actuales no sirven. Los presupuestos están pidiendo otros nuevos porque han quedado obsoletos. Como es natural, a cada vuelta del camino corresponde una nueva explicación del Gobierno, y yo ya no sé si vamos a tumba abierta hacia el zamarrazo final o hemos de creernos las palabras edulcorantes de Rajoy. Por si faltaba algo ahora estalla la intervención de Chipre y todo es decirnos que aquí no rugirá la marabunta.¡Cuidado! ¡Cómo lo sabrán, digo yo, cuando la Europa de los números también está hecha un lío.! Acostumbrado profesionalmente a vivir de las palabras me acojo a lo que acaba de decir la Ministra de Trabajo y Empleo. Asustada sin duda por las malas perspectivas que vienen sobre 20l3 y 2014 nos recuerda que ellos nunca dijeron que iban frenar la cifra del desempleo en tiempo de recesión. Por lo visto ellos querían decir algo más obtuso, difuso y confuso que no se entendiera del todo, pero a mí me cuesta creer que toda la gente que les votó, que fue mucha, lo hizo simplemente para aprender a jugar al padel. ¿ Es que hemos olvidado ya la prédica electoral donde se decía de mil maneras que la primera preocupación del PP era terminar con el paro? Otro lugar común de este Gobierno es la austeridad vía Merkel. Está cada vez más claro que sin crecimiento no se mueve nada y ni poniendo a ayunar a los niños de teta nuestra economía sale del abismo en que anda metida. Asi que veremos qué nos tienen guardado para final de año.
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