El tiempo, ese juez que quita y da razones, viene a certificar, una vez más, el aislamiento y abandono secular de nuestra provincia. Sí, queridos lectores, la Alta Velocidad (perceptible ya en buena parte del país y realidad a corto plazo en el resto de territorios) brilla y, lo que es peor, brillará por su ausencia en Almería. Y es que la historia se repite una y otra vez, sobre todo cuando hablamos de infraestructuras. Ya fue Almería una de las últimas provincias en sentir la presencia de la locomotora de vapor. Ha pasado más de un siglo y tanto el AVE como el Soterramiento nos vuelven a recordar nuestro pasado histórico. Lo cierto es que se han construido 27,8 kilómetros (entre los términos municipales de Vera y Sorbas) de los más de 100 que conforman el trazado del AVE a su paso por la provincia y el hecho evidente es que, sin la citada infraestructura, Almería se estanca mientras que el resto del país se sube al tren de la velocidad. El pasado mes de Julio, los empresarios almerienses unidos con la sociedad civil clamaron a las distintas administraciones para que, de una vez por todas, dejen de ahogar a la provincia y la conecten con el objetivo de que nuestra economía se desarrolle. No voy a nombrar ninguna otra provincia porque me alegro del progreso de los demás territorios de mi país, pero sí clamo, como cualquier otro almeriense, porque se haga justicia con nuestro territorio. Todos sabemos que la tasa de paro es vergonzosa y que, en buena parte, se debe a nuestra carencia de infraestructuras: “Almería es una isla” y como ciudadano se queda uno perplejo al observar que, después de invertir un buen número de millones de euros, la obra del AVE ha quedado paralizada y los túneles tapiados. Lo cierto es que desde que salió del Ministerio el almeriense Jesús Miranda Hita esta obra vital para Almería ha quedado en vía muerta.. Cuando repasamos la hemeroteca y ve cómo desde mediados de los años noventa del siglo pasado se viene hablando de AVE y Soterramiento afirmando (nuestros representantes populares y socialistas) que como muy tarde llegarían a ser realidad en 2005 no tenemos más remedio que recordar tanta desidia, tanta demagogia y tanta mentira con Almería: ¿Recuerdan la Autovía del 92 que a toda Andalucía llegó ese año y a Almería en 2002?; ¿ Y de la A-7 a Málaga qué me dicen tras décadas de retraso?
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