Pocas cosas son más predecibles que una impresión positiva y razonable de la Feria que acaba por parte del alcalde que la organiza. Por lo tanto no insistiré en lo que, por otra parte, pienso que ha sido la tónica de los comentarios postferiales en esta edición de 2015: una feria ordenada, que ha mejorado en algunos aspectos y que en otros debe seguir haciéndolo. La tónica habitual de satisfacción los últimos años. Sin embargo, lo que me parece más relevante y en lo que todos han estado de acuerdo es en la capacidad de nuestra Feria como elemento impulsor de la actividad económica y el empleo en Almería. Esas aportaciones, tan valiosas y necesarias en estos momentos, deben hacernos sentir optimismo de cara a la celebración de eventos y actividades que sirvan de revulsivo a la economía local. De hecho, y esto es un dato al margen de las interpretaciones de carácter político, este año los hoteles han tenido una ocupación del 95%, casi el 100% en los situados en el centro, se han registrado casos de entradas agotadas en algunos conciertos y casi se ha duplicado el número de asistentes a los actos deportivos de Feria. Es decir, que la recuperación económica ha estado en Almería no de paso por la Feria, sino que me atrevo a decir, como hizo la Ministra de Empleo, Fátima Báñez, que va a quedarse entre nosotros.
Los profesionales de la hostelería almeriense coinciden en este análisis, pues han visto cómo se han incrementado sus ingresos a través de la presencia de almerienses en la calle y en sus locales con motivo de las fiestas en honor de la Virgen del Mar. Esa sensación de recuperación progresiva que se ha traducido en mayor volumen de ingresos debe hacernos sentir, ya digo, optimistas de cara a un mejor futuro económico en Almería. Por otro lado, creo que debe destacarse el fortalecimiento del acento almeriense en esta nueva edición ferial. Un carácter local que es perfectamente compatible con la vocación de universalidad que tiene una celebración abierta a todos y que cada año alcanza más niveles de participación popular en actividades como la Feria del Mediodía, las cabalgatas y la presencia diaria en el recinto ferial.
Pero la Feria de 2015 es ya pasado. Empezamos a pensar ya en la de 2016 y en los cambios que la nueva ordenanza traerá, mejorando aspectos concretos del actual modelo y progresando hacia un nivel en el que la corrección de errores detectados permita seguir creciendo, mejorando y hacer de estos días de Feria no sólo un motivo de alegría para todos los almerienses y cuantos nos visiten, sino sobre todo, seguir haciendo de nuestra Feria una palanca de generación de riqueza y empleo en Almería.
Consulte el artículo online actualizado en nuestra página web:
https://www.lavozdealmeria.com/noticia/9/opinion/89894/una-feria-que-crea-riqueza-y-empleo