El secretario general de Agricultura y Alimentacion de la Junta de Andalucía, Rafael Peral, ha destacado las diferencias entre los modelos de cultivo entre Almería y el resto de Andalucía, alabando la eficacia económica en cuanto a producción por superficie cultivada de la agricultura intesiva almeriense. Peral cree que la competitividad almeriense nace de su capacidad de adaptación ante la adversidad, hecho que se ha logrado a base de esfuerzos propios.
El secretario de Agricultura y Alimentación ha defendido una concentración del sector que "haga partícipe al agricultor, que no se puede quedar descolgado de este proceso", anunciando que la Junta trabaja en nuevas medidas legislativas para favorecer el asociacionismo entre productores.
Peral defendió el trabajo desde una perspectiva de "cadena alimentaria", es decir, trabajar codo con codo con todos los eslabones que intervienen en el proceso de producción, distribución y comercialización de los productos hortofrutícolas. La Ley de Agricultura del Ejecutivo regional sentará en la mesa a todos los participantes, aseguró Rafael Peral, que a su vez destacó la especialización y la producción ecológica como impulsos de cara a conseguir un mayor valor añadido sobre el producto.
La gestión de los residuos vegetales también ha concentrado parte del discurso de Peral, para lo que la Junta ha diseado una Estrategia de Gestión de Residuos Vegetales que pretende "recoger las mejores prácticas del sector" para el uso de estos deshechos tanto para compost como para abono o alimento utilizable en ganadería.
En cuanto al agua, se ha defendido un plan global privado-público que tenga en cuenta la legalidad del agua, la preservación de los acuíferos y el asociar el coste a la rentabilidad del cultivo. El cumplir estas exigencias, dice Peral, pondría las cosas a la Junta de Andalucía "para decir que no".
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