Medios internacionales se hacen eco de la “fiebre ecológica” de Almería

El portal de información hortofrutícola FreshPlaza, una de las puertas comunicativas principales a los mercados europeos que tienen los productores de frutas y hortalizas, se ha hecho eco de las cifras que el sector agroalimentario maneja sobre los incrementos futuros de la agricultura ecológica en la provincia. De acuerdo con los datos aportados por la asociación Coexphal, el gerente Luis Miguel Fernández confía en que este crecimiento de los "invernaderos ecológicos" será una realidad "si la demanda de los importadores europeos continua en la tendencia actual, algo que es muy posible en estos momentos".

El consumo de productos ecológicos en el mercado europeo ha cosechado un crecimiento que se ha sostenido con el paso del tiempo, en especial durante los últimos cinco años. Una tendencia que sigue en aumento ya que, de acuerdo con el gerente de Coexphal, los planteamientos de campaña de algunas centrales comerciales ya avisan de que la mitad de los productos de sus lineales deberán ser ecológicos en el corto o medio plazo.

La ventaja de Almería
"La provincia de Almería tiene una gran ventaja sobre Holanda, su competidor principal en agricultura intensiva, en el mercado ecológico; el cultivo holandés no se hace sobre suelo, sino sobre sustrato hidropónico, algo contradictorio con la futura regulación europea sobre producción ecológica, que solo contempla el cultivo en suelo para certificar los productos ecológicos. Un beneficio enorme para la agricultura almeriense, que podrá suministrar productos orgánicos que algunos de sus principales competidores no puede hacer.

Conversión de cultivos
El tránsito a la agricultura ecológica en Almería también se ha beneficiado de la "revolución verde" iniciada en la provincia en 2007, fecha a partir de la cual el sector intensificó la búsqueda de métodos de cultivo más sostenibles y respetuosos con el medio ambiente, una aspiración que resultó en la generalización del control biológico para el manejo de plagas.

Este método de control favorece el uso de insectos para llevar a cabo la polinización de las plantas de forma natural, haciendo que "el uso de pesticidas apenas se de en los invernaderos, pues perjudica los insectos que cuidan de las plantas en el interior de las explotaciones".