Marruecos conectará con la UE por tren 4 años antes que Almería

La ‘guerra de los corredores’ amenaza con suponer un serio contratiempo para la agricultura almeriense. Los últimos anuncios realizados desde el Ministerio de Fomento indican que el Corredor Central estará funcionando en el año 2020, mientras que el Mediterráneo, en el mejor de los escenarios previstos, no lo hará hasta el año 2024.

El primer efecto para el sector hortofrutícola almeriense es que ese Corredor Central supone una plataforma de salida para las mercancías procedentes de Marruecos, particularmente sus hortalizas, que de esta forma competirán con ventaja con las almerienses en los mercados comunitarios.

Inversiones
La cuestión es que Marruecos ha iniciado ya el camino para aprovechar esa nueva vía de salida hacia Europa y ha destinado fuertes inversiones en sus infraestructuras.

Por una parte se está produciendo un desarrollo importante de cultivos de invernadero en una zona al sur de Tánger, por otra ya se han realizado inversiones importantes para mejorar las conexiones desde esas zonas de cultivo y el puerto de Tánger Med, ubicado frente a las costas gaditanas. Entre esas infraestructuras una línea de alta velocidad ferroviaria que tiene su estación término en el propio puerto.

Vía directa
De esa forma, y tras cruzar el estrecho en barcos portacontenedores, las hortalizas marroquíes tendrán a su disposición el corredor central que atraviesa España hasta la frontera francesa. Es el temor de los agricultores almerienses que, por boca del secretario general de Coag-Almería, Andrés Góngora, advierten que, en el mejor de los casos, el sector hortofrutícola almeriense tendrá que esperar cuatro años para tener acceso por tren a los mercados comunitarios porque el Corredor Mediterráneo avanza a una velocidad muy inferior al central.

Este asunto tiene su importancia en un escenario comercial en el que gana terreno con rapidez la exigencia de aminorar la huella de carbono. Góngora explica que Europa y las grandes distribuidoras están ya empezando a exigir certificados de emisiones y en esa otra batalla el transporte ferroviario supone una ventaja competitiva con el camión, cada vez más arrinconado por la UE.

Cita con el subdelegado
Los responsables de COAG-Almería mantuvieron ayer una primera reunión de trabajo con el subdelegado del Gobierno, Manuel de la Fuente, para abordar diversos asuntos en los que trabaja la organización agraria, entre ellos los problemas del agua para riego, los robos en el campo, las relaciones laborales y la inmigración, la higiene rural o el transporte de frutas y hortalizas en ferrocarril. A decir de los agricultores, esa primera jornada de trabajo ha sido “positiva” y esperan mantener la interlocución para avanzar en los temas.

El agua es, sin duda, el primero de los problemas a resolver y Coag ha pedido a De la Fuente que traslade la petición de que se bonifique en Almería el precio del agua desalada para dejarla en los 30 céntimos que están pagando los regantes murcianos. Junto a ello reclaman el arreglo de la desaladora de Villaricos, la construcción de otra en Pulpí o la ampliación de la planta de Carboneras.

Residuos 
Para la organización agraria es preciso que se adopten medidas desde el Ministerio de Medio Ambiente, entre ellas la creación de una mesa de trabajo para abordar un problema de los residuos plásticos que se repite año tras año y que compromete el futuro del sector.

Andrés Góngora y el resto de la Ejecutiva de Coag han valorado positivamente la labor que están desarrollando los efectivos del Grupo ROCA de la Guardia Civil para combatir los robos en el campo y en explotaciones agrarias.

El secretario provincial considera que es importante mantener una estrecha relación de trabajo con el subdelegado del Gobierno.

Coag ha comunicado al subdelegado del Gobierno que en determinados momentos de la campaña hay escasez de mano de obra, por lo que “necesitamos que se incorporen más personas al mercado laboral y para ello es necesario que se flexibilicen los arraigos a los trabajadores inmigrantes”