Los niveles de los pantanos de cabecera para el trasvase Tajo-Segura, los de Entrepeñas y Buendía, aún puede permitir un envío de algo menos de 20 hectómetros cúbicos a las provincias del sureste, Almería, Murcia y Alicante, pero las dudas se centran en si podrán mantenerse los envíos en el próximo mes de septiembre.
En Castilla-La Mancha parecen tenerlo claro y tanto el PP como el PSOE regionales han dejado claro que siguen estando en contra de los trasvases, “aunque los apruebe un consejo de ministros socialista”, según afirmaba ayer la portavoz del Grupo Parlamentario Socialista en aquella comunidad, Blanca Fernández.
Coincidencia
Entre los dos principales partidos políticos castellano-manchegos hay coincidencia en la oposición a la política de trasvases cuando las condiciones de los embalses y la disponibilidad así lo aconsejen.
Una coincidencia con matices, pero coincidencia al fin y al cabo. Lo expresaba así el presidente del Gobierno de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, al afirmar que tiene claro que “por encima de cualquier cosa están los intereses de Castilla-La Mancha, incluso por encima de los intereses del PSOE”.
Postura firme
Los socialistas manchegos insisten en que están en contra de los trasvases “aunque los apruebe un Consejo de Ministros socialista”, y sostienen que el partido no cambia de posición en este tema “ni dependiendo de cómo sople el viento ni dependiendo del gobierno que esté en Madrid en cada momento”, según la portavoz del Grupo Socialista Blanca Fernández.
En su opinión, los socialistas castellano-manchegos “sigue manteniendo la misma opinión de siempre”, y aboga por buscar alternativas que hagan innecesarios los trasvases en el medio plazo “para seguir desarrollando la economía y la ecología de la región, sin cargarnos las de otras zonas del sureste español”.
Cortar los envíos
El Partido Popular de Castilla-La Mancha instaba al actual Gobierno socialista a buscar esas alternativas para evitar que se produzcan nuevos trasvases en un escenario como el actual, que no garantiza los recursos en origen.
María Roldán, diputada del Grupo Parlamentario Popular en el parlamento regional recordaba que la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, “no ha dicho en ningún momento que no vaya a haber más trasvases” e ironizó recordando que “ellos dijeron que iban a cortar los trasvases si llegaban al Gobierno; ya están en él, en posesión de los mecanismos necesarios para impedir los trasvases, y la realidad es que se sigue trasvasando”.
Defiende agua en cantidad y calidad para Castilla-La Mancha y, para el resto de España, la creación de un Pacto Nacional del Agua. Roldán ha tendido la mano al PSOE para defender el derecho al agua en Castilla-La Mancha y actuar con coherencia.
Inversiones
La Federación de Regantes de Almería observa con preocupación los movimientos de los responsables políticos de Castilla-La Mancha y han pedido que, ante las dudas surgidas en torno al futuro inmediato de los trasvases desde otras cuencas, se pongan en marcha con carácter de urgencia las obras hidráulicas pendientes en la provincia, en especial las de las desaladoras, con ampliaciones, reparaciones o construcción de otras nuevas, a los proyectos de reutilización de aguas residuales depuradas en la agricultura.
Temen que los retrasos de varios años vuelvan a ocasionar problemas de suministro a los regantes en el caso de que se suspendan los trasvases
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