La consejera destaca el papel del seguro agrario ante los efectos de la sequía

La consejera de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Carmen Crespo, ha destacado “el importante papel que juegan los seguros agrarios combinados en situaciones como la sequía pertinaz que está afectando al campo andaluz en los últimos tiempos”. “Los agricultores y ganaderos deben hacer frente a numerosos desafíos entre los que se encuentran circunstancias que escapan a su control”, ha comentado Crespo citando como ejemplos “la frecuencia y cantidad de las precipitaciones o el incremento de las temperaturas que trae consigo el cambio climático”. 

Las pólizas de seguros agrarios combinados establecen una fórmula de participación público-privada encaminada a garantizar la renta de los productores ante daños que puedan registrarse en sus producciones como consecuencia de adversidades climáticas. Asimismo, también cubren a los asegurados ante virosis, en el caso de las producciones hortícolas; o ante enfermedades o accidentes de los animales, en el caso de la ganadería. 

Por esta razón, como ha explicado Carmen Crespo, “el Gobierno andaluz está apostando firmemente por el aseguramiento y facilitando a los productores de Andalucía la contratación de pólizas que sirvan de red de seguridad antes situaciones complicadas que podrían comprometer la viabilidad de las explotaciones”. A modo de ejemplo, la consejera ha citado la “importante novedad” que se ha implementado en la convocatoria de ayudas a los seguros agrarios para que “los profesionales del campo no tengan que esperar un año para poder recibir los fondos que les corresponden, sino que puedan recuperar la inversión realizada en el aseguramiento en un plazo mucho más breve”. “A partir de ahora, la Consejería de Agricultura abonará las subvenciones en el momento de contratación para mejorar así la liquidez de las empresas agrarias andaluzas”, ha recalcado Crespo. 

Para la consejera, “estas subvenciones son un aliciente más para que el sector agrario andaluz se anime a asegurar sus cosechas y continúe creciendo la superficie que cuenta con una póliza en vigor en esta región”. Carmen Crespo ha hecho hincapié en que el aumento de las contrataciones se alinea con el incremento de fondos que la Junta está destinando a estas subvenciones, a las que se destinan alrededor de 12 millones de euros para complementar los incentivos que concede la Entidad Estatal de Seguros Agrarios (Enesa) y “hacer este instrumento aún más atractivo y accesible para los productores”. 

Estas subvenciones suponen un aliciente para que el sector agro proceda a asegurar sus cosechas, existiendo cada vez más concienciación en Andalucía. De hecho, la comunidad autónoma lidera el ranking nacional en contratación de seguros y representa el 16% de la superficie agraria asegurada. 

Abono de ayudas 

La consejera de Agricultura ha puesto en valor también el abono de un primer pago de las ayudas de la convocatoria de 2023 a la contratación de seguros agrarios combinados de 2022. En concreto, la Junta ha pagado ya subvenciones por más de ocho millones de euros a cerca de 9.100 productores de Andalucía. 

Al respecto, Carmen Crespo ha destacado que “se ha intensificado la subvención para sectores gravemente afectados por la sequía, como el olivar, los cítricos, los frutos secos, el viñedo de vinificación o las actividades ganaderas”. 

Por provincias, los productores de Almería han recibido ayudas por más de 1,44 millones de euros (casi 1.820 beneficiarios); mientras que 596 agricultores y ganaderos de Cádiz han rozado los 578.000 euros. En Córdoba, los pagos se han acercado a 1,9 millones de euros para casi 1.960 expedientes; en Granada, han superado los 481.700 euros para 875 productores reciben; en Huelva, se han acercado a 843.000 de euros relativos a 813 ayudas; y en Jaén se han pagado más de 466.000 euros a 621 beneficiarios. Por su parte, 474 productores de Málaga han recibido algo más de 297.500 euros; y en Sevilla, la Consejería de Agricultura ha abonado casi 1.940 subvenciones por valor de más de dos millones de euros.