En el preámbulo de la campaña, el consejero de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural pasa revista a algunos de los temas clave.
Estamos a punto de estrenar una campaña hortofrutícola, ¿cómo ve el inicio de este ejercicio?
Ojalá que sea una una buena campaña para todos. A fin de cuentas, si la agricultura va bien en Almería, Almería va bien. Si la agricultura va mal, el resto de los sectores se acaban resintiendo. Todos sabemos que se trata de una actividad que depende de muchas vicisitudes, muchas de ellas externas a la propia actividad. Habrá que ver cómo funcionan los competidores. Habrá que ver también, como se comportan las temperaturas y como afectan a la productividad de nuestros cultivos. Ojalá, que tengamos una buena campaña en lo que a salud vegetal se refiere y podamos estar exentos de plagas. Ojalá que consigamos muchos kilos y buen precio. Creo que esta sería la mejor noticia.
De todas formas, ¿hay algún tema que podría considerar candente para esta campaña?
El tema más importante, sin duda, es el agua. Yo creo que no hay otra cuestión más relevante ni otra realidad que afecte más a la agricultura almeriense. Desde luego, nosotros estamos trabajando intensamente en este ámbito. Ahora, a primeros de septiembre voy a mantener otra reunión con el secretario de Estado de Medio Ambiente para seguir repasando la evolución de las averías continuas que sufre la desaladora de Carboneras. También es importante ver si vamos a poder poner en marcha, de una vez por todas, la desaladora del Bajo Almanzora, aquella que se llevó la riada hace doce años. Igualmente, hay planes para el Poniente en relación con la desaladora del Campo de Dalias, que, sin duda, necesita ser ampliada y modernizada. Y, recientemente, hemos tenido la oportunidad de conocer de cerca una nueva desaladora, la de Mar de Alborán, que ya está en funcionamiento.
Con planificación, con ejecución de obras, y con proyección -que es la manera de trabajar de la Junta de Andalucía- creo que podremos solventar el problema del agua. Y si tenemos la suerte de contar con un otoño lluvioso y las balsas se llenan, muchísimo mejor.
Existe la sensación de que los asuntos agrarios generan mayor nivel de cooperación entre administraciones, aunque estén gestionadas por partidos distintos. ¿Es más fácil entenderse en el campo?.
Realmente creo que sí y lo he comentado varias veces en las últimas semanas. Creo que la principal tarea que tiene la Consejería de Agricultura no es la de dirigir la agricultura de Andalucía. Es la de acompañar a los agricultores. Para ello tenemos que centrarnos en lo que son sus problemas. La verdad es que no son problemas ni de izquierda ni de derecha; ni del PP ni del PSOE. Los problemas de la agricultura requieren de un buen nivel de interlocución. Nosotros, podemos presumir de mantener una excelente relación con todas las organizaciones agrarias de nuestra Comunidad. Es necesario escuchar a todos, atenderles e intentar ponérselo fácil. Bastantes complicaciones tiene ya el agricultor en el día a día como para que vengamos nosotros, a complicarle aún más el asunto. Al final, si velamos por el interés general, creo que estaremos haciendo bien nuestro trabajo y podremos seguir hablando de un sector que nos dará muchas alegrías en el presente y que es el sustento de tantísimas familias. Y, sobre todo, que tiene garantizado su futuro.
El futuro de la Agricultura parece determinado por cuestiones como la sostenibilidad y la obligada evolución tecnológica. ¿Se ve esto con tranquilidad desde la perspectiva de organizaciones agrarias y sectoriales y de los agricultores mismos?
Es verdad que el sector primario en general y la agricultura en particular, no vive exento de la revolución tecnológica con la que todos convivimos. La aplicación de las nuevas tecnologías, incluso de la inteligencia artificial, ha de concebirse como una herramienta de cara al futuro que tiene que facilitar la tarea del agricultor. La Administración pública debe intentar que esa revolución digital llegue a todo el mundo. Que no sea algo única y exclusivamente dirigido a aquellos que se lo puedan permitir. Tenemos que democratizar las nuevas tecnologías en beneficio de todos. Y, tenemos además que impulsar la formación en ese sentido. Por ejemplo, la Junta cuenta con un instrumento muy potente que es el IFAPA, conocido por todo el mundo en sus tareas de investigación y de formación, las cuales deben estar a disposición de todo el mundo. El objetivo primordial es que no haya ni un solo agricultor en Andalucía que, queriendo formarse, no pueda hacerlo. Para eso está su administración autonómica.
La próxima Fruit Attraction será la primera para usted como Consejero...
Conozco bien la feria, pero ahora habrá que afrontarla desde una visión diferente. Antes representaba a una ciudad con un peso específico en el sector. Ahora, representamos la realidad agrícola de la Comunidad Autónoma, que cuenta con la agricultura más importante de toda España. No puedo olvidar que el 25% de la agricultura de nuestro país se producen nuestra tierra. Por eso, iré ilusionado y contento. Vamos a elaborar una buena agenda que nos permita trabajar mucho y representar bien al sector.
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