Un equipo de investigación del Instituto Andaluz de Investigación y Formación Agraria, Pesquera, Alimentaria y de la Producción Ecológica (IFAPA), junto con la Universidad de Granada (UGR), ha determinado que los finales de octubre o primeros de noviembre son el momento ideal para llevar a cabo la regeneración del arbolado de las dehesas. Este hallazgo proporciona una herramienta clave para que los gestores y propietarios de fincas planifiquen con mayor éxito la regeneración de este valioso sistema agroforestal. Los ganaderos, por su parte, podrán beneficiarse del reabastecimiento de bellota para el cerdo ibérico, una fuente crucial de alimento para este ganado.
Hasta ahora, no existían estudios concluyentes que identificaran el momento óptimo para la plantación de encinas. Factores como el tipo de suelo y el clima son determinantes para el éxito de la regeneración de estos árboles, lo que dificultaba la extrapolación de resultados de un área a otra.
Un ecosistema agroforestal único
Las dehesas, presentes principalmente en el sur de España y Portugal, son ecosistemas agroforestales de alto valor ambiental, compuestos por bosques abiertos de encinas y alcornoques junto a pastizales donde se cría ganado y se desarrollan actividades agrícolas. A diferencia de otros ecosistemas forestales, que se regeneran de manera natural, las dehesas requieren de intervención humana para superar desafíos como el envejecimiento de los árboles, plagas, y competencia vegetal.
El experimento
El equipo de investigación plantó 2.400 plántulas de encina en cuatro localizaciones de Andalucía (Granada, Jaén, y dos en Córdoba) bajo diferentes condiciones climáticas y de suelo. Se compararon los resultados entre plantaciones realizadas en octubre de 2019 y febrero de 2020, con y sin la eliminación de malas hierbas. Los datos recogidos demostraron que el factor más importante para el éxito de la regeneración es la competencia con otras plantas. En lugares con inviernos más suaves y veranos más largos, como Jarosa e Hinojosa del Duque, la ausencia de hierba favoreció el crecimiento de las plántulas. Sin embargo, en zonas más frías como Becerra y Mágina, la plantación en octubre fue más exitosa, sobre todo cuando se eliminaron las malas hierbas.
Recomendaciones
En general, los expertos recomiendan realizar las plantaciones en octubre o principios de noviembre, asegurándose de que el suelo esté húmedo tras las lluvias y controlando la vegetación competidora durante al menos los primeros años de desarrollo de las plántulas.
Investigación en curso
El equipo del IFAPA sigue investigando para comparar la efectividad de las plantaciones frente a las siembras directas de bellotas. Este enfoque tiene el potencial de desarrollar árboles con un sistema de raíces más profundo, lo que les ayudaría a resistir las sequías veraniegas. El objetivo a largo plazo es ofrecer recomendaciones sobre las mejores técnicas para la regeneración de las dehesas en un contexto de cambio climático.
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